Carlos el "Indio Solari" y Los Redondos brindaron su último show un 4 de agosto de 2001, de manera inesperada, en el ex Estadio Olímpico de Chateau Carreras en la provincia de Córdoba junto a más de 45.000 fanáticos. La historia del final es aún una incógnita para todos.
Aquel día ni los fans ni los propios músicos sabían que se aproximaba el cierre de una etapa. De hecho, esa misma tarde previo al concierto, el Indio dio una entrevista con el diario La Voz en donde declaró que su vida se encontraba con bastante plenitud "La banda hace lo que quiere y de esta manera vivímos bien" afirmaba.
Según lo poco que se conoce, parte de la misteriosa separación estuvo relacionada a conflictos internos entre el Indio, Skay Beilinson y su por entonces manager La Negra Poli. El Indio le reclamaba a la representante copias de los audios y videos de los shows de Racing, River y Córdoba que habían sido documentados con estándar internacional y varias cámaras profesionales. Un verdadero tesoro audiovisual que el cantante quería tener en su poder.
Lo cierto es que como reveló Solari varios años después, esas copias nunca se las entregaron. "Me sentí traicionado" declaró en una entrevista con Mario Pergolini en el año 2019.
Por otro lado, según detalla el libro "Fuimos reyes", de los periodistas Mariano Del Mazo y Pablo Perantuono, el quiebre se desencadenó varios meses antes en un viaje a Nueva York, lugar donde editaron su último disco 'Momo sampler'.
Revista GENTE se comunicó con Mariano Del Mazo, uno de los autores, quien nos explicó las diversas causas de la irremediable disputa.
Qué ocurrió entre el Indio Solari y Skay
En el año 2009 Skay Beilinson declaró ante el diario La Nación que "había un miembro de la banda que quería apoderarse del proyecto Patricio Rey". Mariano Del Mazo afirma que fue muy claro el momento en que se rompió el equilibrio que había existido en gran parte de la trayectoria del grupo "En los últimos discos el Indio tenía más decisión y sus ideas musicales cobraban más fuerza", declara el periodista y escritor, haciendo referencia al sonido electrónico que se ve reflejado en "Último bondi a Finisterre" y "Momo sampler".
"De alguna manera el sonido característico de la guitarra de Skay, sobre todo la década del 80, estaba totalmente borrado. Eso no quiere decir que Skay no participara, pero si cambió la ecuación de fuerzas" asegura el autor de "Fuimos reyes" libro que revela cómo fue el final de la mítica banda de rock nacional.
El vínculo entre ambos venía desgastándose desde hace algún tiempo. La relación entre Skay y La Negra Poli influyó de alguna manera ya que el Indio no estaba integrado en ese 'bloque' que se había armado entre la pareja.
"El Indio en un momento vio que estaba en minoría, y pienso que también debe haber visto que el reparto de un 33% era un tanto injusto teniendo en cuenta que él cada vez tenía más injerencia y más trabajo. De todos modos, siempre estas situaciones se dan a raíz de un desgaste progresivo" describe Del Mazo quien sostiene que sonoramente está claro que los últimos dos discos de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota tienen mucho más que ver con el Indio, dado que esto se ve reflejado también en su primer disco como solista.
Además agrega "una cosa es una banda de amigos que se junta para llevar a cabo un proyecto artístico, y otra cosa es ver que de pronto hay mucho dinero en juego" afirma y retruca "Ahí comienzan las situaciones lamentables y empiezan a figurar los abogados y los entornos".
Por qué el show de Córdoba 2001 fue el último concierto de Los Redondos
Los redondos se presentaron en el ex Estadio Olímpico de Chateau Carreras en la provincia de Córdoba y tenían previsto un show para finalizar el año en el mes de diciembre en el estadio Unión de Santa Fe. El concierto nunca llegó a realizarse, principalmente por el contexto social y político del país.
"La situación del país ya no daba más. Además, cada concierto de los Redonditos tenía un nivel de peligrosidad muy alto y eso sumado al contexto social y económico volvía cada show en un movimiento de ajedrez" apunta Mariano Del Mazo en referencia a la crisis del 2001.
La represión policial ya se había presentado en shows anteriores de la banda y su público convivía permanentemente con incidentes. "Era un clásico que el público ricotero agrediera a la policía, y también se había vuelto un clásico que quienes no tenían entradas se amontonaran en la puerta e ingresaran a toda costa" afirma el periodista. Cabe recordar, que por aquel entonces Los Redondos no tenían muchas locaciones para tocar debido a los percances ocurridos en River durante abril del 2000 y previamente el fallecimiento de Walter Bulacio en 1991 a manos de la brutalidad policial.
Si bien, nunca hubo una declaración oficial de la separación, la banda quedó en una suerte de muerte lenta. Lo que ellos habían planteado en un momento como un año sabático, culminó en una separación definitiva. Pero nunca fueron conscientes de que aquel show podía ser el último concierto que darían juntos.
Los conflictos venían acumulándose, las 'diferencias' se hacían cada vez más fuertes. El Indio acababa de ser padre y cada miembro de la banda se encontraba en un momento particular de su vida. Hoy a 20 años de la disolución de Los Redondosos, las causas siguen siendo un misterio y el público sueña con un futuro reencuentro.
