El embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, habló por primera vez sobre la muerte de Alejandro Benítez. Un maestro que fue embestido por un camión en una curva entre la ruta que une Santa Cruz de la Sierra y Cochabamba el pasado 3 de julio. El argentino se encontraba de viaje por Bolivia y se movilizaba en moto. Según sus allegados, le negaron atención médica y falleció.
"Es un hecho lamentable y no se justifica por más que uno busque respuestas”, comenzó diciendo Ariel Basteiro, en diálogo con TN. Y continuó, “En un principio no nos enteramos por la familia, el que intervino fue al consulado de Cochabamba donde se dio la situación”.
Es que las autoridades no habían tomado nota del caso hasta pasados 7 u 8 días del fallecimiento del hombre. “La familia se comunicó con el consulado para repatriar los cuerpos. El consulado intervino y de forma más rápida que la habitual se pudo repatriar”, aclaró el ex diputado nacional kirchnerista.
El funcionario a su vez recapituló el accionar de las autoridades bolivianas en el caso. Alejandro fue trasladado al pueblo más cercano del lugar de los hechos, en donde "fue atendido de urgencias" en una salita, pero el hombre requería ser trasladado a uno de los grandes centros urbanos como Santa Cruz o Cochabamba para ser tratado en un centro de alta complejidad. Pero el traslado era pago por lo que esto ralentizó el accionar de las autoridades médicas.
“En Bolivia hay problemas de comunicación. Es un pueblo muy chiquito que generó una demora particular y lo que solicitaba la sala de primeros auxilios eran 1000 pesos bolivianos (145 dólares). No lo estoy justificando pero hay que entender el sistema de salud boliviano”, argumentó el embajador argentino. "Es muy deficiente y el motivo por el que le requerían no era para atenderlo, porque lo atendieron, sino para poder trasladarlo a Santa Cruz o Cochabamba, esa fue la respuesta que recibimos de Bolivia", explicó sobre la información recabada de los hechos.
El caso de Alejandro generó que se convocara a una reunión con las 17 autoridades argentinas y bolivianas “para que esto no vuelva a suceder y que se agilice el sistema de comunicación”. Además el pasado martes se elevó formalmente una nota al Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, “reclamando explicaciones y manifestando su profunda preocupación acerca de la situación del fallecimiento de un ciudadano argentino, que estaba en una situación de riesgo de vida y no tuvo el tratamiento médico necesario”.
