Pasaron más de 24 horas desde que se descubrió el femicidio de María Alejandra Abbondanza (38), quien fue encontrada quemada en la casa de un vecino en Campana. Al momento, se encuentran detenidos Agustín Leonel Chiminelli (24) y sus padres, Liliana Esther Sánchez (64) y Carlos Rubén Chiminelli (69). Los tres esperan para ser indagados el lunes por la fiscal Ana Laura Brizuela.
En las últimas horas, trascendió información que podría aportar al caso: una semana antes del homicidio, el principal sospechoso había sido denunciado por violencia de género y tenía una restricción perimetral que le impedía acercarse a una expareja.
Según confirmó Infobae, fuentes de la investigación señalaron que el viernes pasado, fecha que coincide con la desaparición de Alejandra Abbondanza, Agustín Chiminelli, alias “Chimi”, recibió en su domicilio la notificación de una restricción de acercamiento del Juzgado de Familia de Campana, tras una denuncia que radicó una ex por violencia de género.
Sobre esa línea, el medio corroboró que la denuncia se realizó el sábado 10 de septiembre, el miércoles 14 se formuló la prohibición de acercamiento y, el viernes 16, Chiminelli quedó notificado.
Asimismo, se supo que la persona que recibió esa notificación fue la madre del principal acusado del femicidio, que convivía con su hijo y su marido en una casa, ubicada en la esquina de Juan Bautista Alberdi y Moreno, en la misma cuadra donde vivía María Alejandra.
En tanto, la denunciante, cuya identidad se mantiene bajo resguardo, fue citada para prestar declaración testimonial por la fiscal Brizuela, titular de la UFI N°2 del departamento judicial de Zárate-Campana.
Otro testimonio en contra del detenido
Al testimonio de la primera denunciante se sumaría el de una segunda joven, quien también habría tenido un vínculo amoroso con “Chimi”. La chica en cuestión, este domingo, hizo circular un posteo en Instagram en el que describió al sospechoso como “un psicópata y manipulador disfrazado de nene bueno”.
“Varias veces me imaginé muerta en manos tuyas”, aseguró. Además, apuntó contra los padres del joven y dijo que “veían todo” lo que hacía. “Tus viejos te apañaban por ser su único hijo”, sentenció la joven.
Respecto a estas declaraciones, a pesar de que aún no hubo una denuncia formal, la fiscalía también planea llamar a declarar a esta segunda persona, ya que sus palabras reforzarían que el acusado tenía conductas violentas hacia las mujeres.
Detalles de la investigación
Mientras los investigadores intentan establecer el vínculo entre la víctima y los acusados, más allá de ser vecinos del barrio, aún se desconoce el móvil del crimen. Sin embargo, fuentes de la investigación confiaron a Infobae que la principal hipótesis es que a María Alejandra la mataron los tres integrantes de la familia Chiminelli. Hasta ahora, el caso se investiga bajo la carátula de “homicidio calificado”.
Por otra parte, un dato llamativo son las publicaciones que hizo el sospechoso en Twitter. La mañana del viernes 16 de septiembre, fecha en la que recibió la notificación de la restricción de acercamiento, Agustín Leonel Chiminelli escribió un tuit dedicado a su madre y le decía que tenía que sentirse “orgullosa”.
“Mamá, lo lamento, pero siéntase orgullosa. Soy como el cemento”, publicó el joven a las 8:50 de la mañana. Nueve horas más tarde, según quedó registrado en las cámaras de seguridad de la cuadra, María Alejandra sacó a pasear su perro y se encontró con Chiminelli hijo. Como se ve en las imágenes, se saludaron y ella ingresó a la propiedad del vecino, donde agentes de la DDI de Campana la encontraron asesinada al día siguiente.
Datos del crimen
Por su parte, los datos preliminares de la autopsia revelaron que a María Alejandra la asesinaron de un fuerte golpe en la cabeza antes de intentar deshacerse de su cuerpo. Fuentes con acceso a la causa confirmaron que la víctima presentaba “un traumatismo cráneo encefálico grave” como causa principal de la muerte.
Los investigadores a cargo del caso barajan la posibilidad de que la mujer fuera asesinada con una mancuerna, que tenía manchas de sangre y que fue encontraba en bolsas de basura que estaban a 50 metros de la casa de los sospechosos. En tanto, el cuerpo habría sido mutilado y quemado con la intención de hacerlo desaparecer. En ese sentido, debido al estado de carbonización, no se pudo establecer el horario de muerte.
Hasta este domingo, los peritos continuaban analizando unos 100 sobres con evidencias levantadas en la escena. También, en el terreno baldío donde encontraron prendas de vestir de la víctima y el collar de su mascota, todo con manchas de sangre. En paralelo analizaban el contenido de los teléfonos celulares de los tres acusados.
