El drama de Silvina Luna y otros famosos a los que la mala praxis les dañó su salud – GENTE Online
 

El drama de Silvina Luna y otros famosos a los que la mala praxis les dañó su salud

Silvina Luna: se suspendió el velatorio porque le harán una autopsia al cuerpo
Los cuerpos preferidos de Instagram sufren la presión de un modelo de belleza perfecto e insostenible a lo largo del tiempo. Muchos famosos buscaron soluciones en el quirófano, pero no siempre salió bien.

El mundo sigue avanzando, pero las mujeres siguen cargando con un historial importante a la hora de escuchar elogios o críticas sobre sus cuerpos. Las famosas que ostentan sus curvas, las favoritas de Instagram, también llevan este peso extra sobre sus hombros, y dentro de la hegemonía que les abre las puertas de la farándula se encuentran reflejadas en comparaciones imposibles.

La presión hizo (y hace) que muchas de ellas decidan seguir en búsqueda de un modelo de belleza perfecto e insostenible a lo largo del tiempo, probando cirugías plásticas y tratamientos estéticos que siempre se plantean como algo novedoso y la solución a varias de sus inseguridades. Pero no siempre la historia termina bien.

Al mismo tiempo, hay menos vueltas en admitir el paso por el quirófano, y todavía se conoce poco de las consecuencias a largo plazo. Es por eso que la palabra de las que se operaron hace dos décadas tiene otro peso al día de hoy.

Silvina Luna, cuando recibió a GENTE en su casa.

Silvina Luna continúa internada, mientras cada vez más víctimas de Aníbal Lotocki se animan a hablar

Silvina Luna (43) continúa internada en terapia intensiva después de que una bacteria ingresara a su cuerpo y provocara una falla multiorgánica. Si bien en los últimos días había presentado una gran mejoría, este fin de semana hubo un retroceso en su salud. Pero, al parecer, todo volvió a acomodarse de nuevo.

Según información a la que pudo acceder este medio, la situación habría mejorado en las últimas horas. Trascendió que sus cultivos dieron negativo, lo cual mejora su cuadro desde el lado infectológico: "Eso es una buena noticia", confirmó Guillermo Capuya (MN 65404).

Y no es la única víctima de Aníbal Lotocki que por estos momentos se encuentra internada en un centro de salud: Fran Mariano, quien lo denunció mediáticamente hace pocas semanas, también se encuentra en un momento delicado, ya que corre riesgo de perder uno de sus pies.

"Yo sentía dolor, fui a ver a mi cirujano actual y vio mi úlcera y me dijo que tenía que volver al hospital porque el virus no murió del todo, el virus que se formó por esa sustancia glucosa que tenía”, contó la semana pasada en una entrevista.

silvina luna fran mariano
Silvina Luna y Fran Mariano, internados.

A Gabriela Trenchi también le sumó rellenos donde no quería y le desató un Síndrome de Guillain-Barré. "Fui por hilos tensores en la cola y me colocó un material hasta los tobillos, que no me lo puedo sacar nunca más. Nadie sabe decir qué es lo que tenemos. Es un veneno que es una bomba de tiempo”, señaló anoche, en diálogo con TN.

Mariano Caprarola fue otra de las víctimas de Aníbal Lotocki. Él también fue por un implante de glúteos, y la reacción de su cuerpo al producto fue la misma que la de Silvina Luna. "A mi cuando me agarró mi médica me dijo que estaba a punto de morirme por la calcemia, tenía todo el cuerpo destruido", le confió a GENTE cuando contó cómo logró salir adelante.

En su caso, eligió someterse a una nueva cirugía invasiva con el fin de retirar el máximo del producto que tenía como relleno. Su testimonio fue desgarrador: durante la operación tenía anestesia de la cintura hacia abajo y podía escuchar como despegaban el plástico endurecido de sus músculos.

Además de haber sido su pareja durante 8 años, Pamela Sosa también fue una víctima más del médico. Si bien no tiene como relleno el mismo producto que le pusieron a Silvina y a Gabriela Trenchi, se constató que tiene silicona líquida.

pamela sosa y anibal lotocki
Pamela Sosa y Aníbal Lotocki cuando eran pareja. (Foto: Archivo)

"Con los estudios me di cuenta de que lo que tenía adentro no es ni siquiera el metacrilato, sino un polímero mezclado con un aceite. A mí me encontraron aceite, silicona en realidad”, apuntó. “Me hubiese gustado preguntarle por qué yo tengo silicona en las piernas, no es lo que pedí ni lo que él me había dicho”, aseguró con bronca. Y agregó: "La marca Metacril aportó datos en el juicio y dijeron que no le vendían hace 15 años, entonces ¿de dónde lo sacó? Nosotras comprobamos que nos metió otra cosa".

"A mí me encontraron granulomas y tengo una diabetes. Si bien es una enfermedad silenciosa, porque no tengo consecuencias visibles, yo me cuido y llevo un régimen en cuanto a la comida y ejercicio físico”, aclaró.

Stefy Xipolitakis también recurrió a Aníbal Lotocki para un relleno de glúteos, y sufre las consecuencias hasta el día de hoy: "Yo sé que tengo algo que no pedí, es una bomba que me puede explotar”, señaló hace poco tiempo.

“La enfermedad crónica que todas tenemos se llama asia, tenés dolores todo el tiempo. Yo me miro en los videos de música y me veo sentada con las piernas abiertas, porque si las cruzo me duele mucho la zona de los glúteos”, explicó.

En esta misma línea está el testimonio de Virginia Gallardo, otra de las víctimas de sus manos. “Yo me opero y a los cinco meses me desgarro, a un nivel que no podía levantar la pierna a noventa grados”, dijo mientras su voz empezaba a quebrarse.

Con las lágrimas ya corriendo sobre su rostro, confesó que pensó que nunca más podría bailar. “Justo fue en 2010, el año que encima llega la propuesta del Bailando, con lo que eso significaba, yo lo hice rota y nunca me victimicé en la pista. Pueden dar fe tanto mi coach y mis compañeros”, señaló. En otra oportunidad, la panelista contó que se operó con Lotocki cuando tenía 21 años y que lo hizo por un canje.

El caso de Marixa Balli

Marixa Balli también fue víctima de la mala praxis. Su paso por el quirófano no fue por un motivo estético, sino para someterse a varias cirugías reconstructivas luego del grave accidente automovilístico que tuvo, en donde su novio de ese momento perdió la vida en el acto.

“El cinturón de seguridad me salvó la vida, aunque también hizo un gran daño en mi cuerpo, y un cirujano en el que yo confié mucho tiempo me hizo una mala praxis que hasta el día de hoy intento corregir”, contó.

Ya de por sí ver las cicatrices me hace daño”, justificó Marixa cuando dijo que no quería dar detalles del tema, justo antes de que se quebrara su voz. Ella intentó atajar las lágrimas, sin bajarse de la historia que merece ser contada.

El cirujano, que era el que me operaba siempre, se mandó una cagada. En lugar de decirme que no estaba capacitado para esto, me dijo ‘Marixa, divina, vení' y me aniquiló. Es un número 1 todavía”, sostuvo con pesar.

Lo peor fue la reacción del profesional después de haber actuado mal: “Nunca reconoció lo que hizo. Te da vergüenza decir lo que me hizo, porque siempre fue un buen cirujano”. Sin embargo, después de eso pasó por otros siete médicos. Y remarcó que si no reclamó, es porque le da vergüenza y odio.

Marian Farjat también denunció mala praxis

Marian Farjat tuiteó esta semana sus sensaciones al respecto de la internación de Silvina Luna, ya que ambas fueron víctimas de mala praxis. Además de pedir una oración en su nombre, contó que se conocieron como exhermanitas de la casa de Gran Hermano.

"Nunca me voy a olvidar cuando, en 2016, me dijo: 'no te operes nunca', y pues, caprichosa, al año siguiente me opere la nariz y tuve la mala praxis", detalló sobre la premonición que no supo escuchar a tiempo.

El calvario para ella empezó cuando tenía 19 años y decidió hacerse una rinoplastía que derivó en problemas respiratorios. “Son muchos años ya que vengo con este tema, ya hace siete años y tres cirugías de reconstrucción; yo quería retocármela un toque y por fuera estaba bastante conforme con lo que me hicieron, pero el problema fue por dentro porque me afectó muchísimo la respiración”, detalló.

“Hasta el día de hoy no sé bien qué me hizo, yo saqué mi propia conclusión, creo que me limó y me agregó en la punta de la nariz un cartílago que no corresponde y que mi cuerpo rechazó, esos indicios demuestra la parte científica”, contó en una extensa entrevista que dio en Intrusos (América TV).

Ella increpó al médico y la respuesta que recibió la dejó con más bronca: “Le decía: ‘¡Por favor decime qué me pusiste!’, y me contestaba que si quería me lo arreglaba gratis, y obvio yo no iba a volver a somerterme a una operación con él, así que después de tanto insistirle me terminó admitiendo que ‘capaz se haya confundido’, no lo podía creer”.

Matilda Blanco reveló que fue víctima de mala praxis: "Tengo que tomar medicación de por vida"

Matilda Blanco surió una lipoaspiración mal hecha que le hizo una amiga cirujana. Todo empezó "por un rollito" que le molestaba, pero en la operación aspiró de más y le produjo un daño en la parte interior de sus piernas.

“Lipoaspiró linfas, durante seis o siete meses tuve las piernas de un tamaño que no se pueden imaginar. Yo tengo que tomar medicación de por vida. La pasé es que la pasé muy mal durante mucho tiempo”, expresó.

Y detalló: “La persona que me lo hizo decidió no cerrar la pared abdominal, con lo cual a mí se me hizo una hernia. No voy a decir quién era esta profesional. Viví una historia tremenda, al menos decirle a las personas que si se quiere operar que se asesore con cirujanos que realmente tengan una práctica real en esto. Hay gente que te toma de conejillo de india, lo sé porque me pasó, me tomaron por eso”.

María Valenzuela y la mala praxis de su odontólogo

María Valenzuela denunció públicamente a su odontólogo debido a un trabajo mal hecho que derivó en dolores insoportables que le impedían comer: "Hace tres años inicié un tratamiento con un odontólogo para colocarme implantes. Se llama Manuel; por razones legales no puedo decir su apellido. Manuel: estoy pesando 35 kilos y en estos tres años ya me internaron varias veces. Manuel, te suplico que des el nombre de tu aseguradora y este infierno se termina".

En búsqueda de la solución, la actriz descubrió que una de sus prótesis de mama estaba rota y el líquido había invadido el cuerpo. Debieron atender eso con urgencia, ya que es una situación peligrosa y habitual para quienes pasaron por ese tipo de cirugía hace más de una década.

Luego, continuó con lo que había pasado en su boca en manos de otro médico. "Me enteré que los pernos me los había puesto torcidos y no había una mordida correcta. Ya no tengo dolor y ya no me afecta para comer", aclaró. Y sumó: "Le mandé acá una carta documento y me la rebotaron. Ya no voy a seguir con esto, es gastar energía en algo que no tiene solución, me lleva a la amargura, la bronca y el odio".

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