El 3 de diciembre, el diario Clarín publicó un artículo de página completa con el título "La verdad sobre la demanda de Editorial Atlántida co
ntra Clarín", donde trata de desmentir lo que informamos en nuestro número anterior (la nota "Hace seis años dijimos esto… Así cualquiera es Genios… Y hoy la justicia nos dio la razón").
Sostiene Clarín:
"GENTE proclama ahora que ´Hoy la justicia nos dio la razón´, como si el fallo de la Sala Uno de la Cámara de Apelaciones hubiera reconocido sus argumentos. La verdad es muy diferente: después de dos sobreseimientos a favor de AGEA, la nueva sentencia sólo ordena que se continúe con el juicio (…) ¿Cómo deforma la verdad la revista?: reproduciendo párrafos de la demanda de la editorial como si formasen parte del texto de la sentencia (ver recuadro aparte). En otras palabras, le hace decir al Tribunal lo que en realidad la propia Atlántida argumenta."
LA ENDEBLEZ ARGUMENTAL. ¿A qué se refiere Clarín? Simplemente, a que GENTE dividió su nota en dos partes: en una, recordamos lo que habíamos dicho cuando el hecho fue descubierto ("Hace seis años dijimos esto… Así cualquiera es Genios"), y allí, naturalmente, volcamos los argumentos de Atlántida. En la otra, parte, confrontamos esto con el fallo, justamente para poder afirmar "Y hoy la justicia nos dio la razón".
Esta polémica no tiene sentido, ya que la resolución judicial, objetiva y precisa, permite decidir quién está diciendo la verdad y quién no.
Clarín dice ahora que "la nueva sentencia sólo ordena que se continúe con el juicio", pero omite decir lo más importante: que los empleados de Clarín fueron procesados y embargados, y que uno de sus más altos directivos (Héctor Mario Aranda) fue llamado a prestar declaración indagatoria.
Veamos qué dice en realidad el fallo, y que el lector juzgue por sí mismo:
"Punto IV: Del dictado del auto de procesamiento y medidas cautelares. Valorando las pruebas reunidas y ya detalladas, a la luz de la doctrina y jurisprudencia especializadas, encontramos reunidos los extremos del artículo 306 del Código Procesal Penal, en relación a Pablo Daniel Colazo y a su equipo de colaboradores, Ricardo Armando Pulgar, Héctor Eugenio García Blanco y Liliana Marta Gioia, ya que se ha comprobado, siempre con el alcance señalado, que los nombrados, tras haberse desempeñado como empleados en la Editorial Atlántida, donde trabajaron en el proyecto de una revista infantil que se denominaría Mega, y de fichas coleccionables, comenzaron a trabajar en Arte Gráfico Editora S.A. (Nota de la Redacción: razón social de Clarín), editorial que, al poco tiempo de sus incorporaciones, lanzó al mercado la revista Genios, cuya idea había sido ya trabajada en la sede de la primera de las nombradas, en clara infracción a la normativa de la ley 11.273 ya mencionada. Por ese motivo (…), corresp
onde que la Sala resuelva en los términos del artículo 306 del Código Procesal Penal. Por ello (…) se decretará el procesamiento, sin prisión preventiva (…), de los nombrados por infracción a la ley citada".
"Punto VII: Situación de los demás imputados. (…) No puede decirse lo mismo respecto de Héctor Mario Aranda, funcionario de la editorial Arte Gráfico, quien conforme a los dichos de la nombrada, y a los suyos propios de fojas 101/112, fue el responsable de la revista Genios. Respecto del nombrado, y en el marco de lo hasta aquí expuesto, el Tribunal considera que se ha reunido el estado de sospecha a que alude el artículo 294 del Código Procesal Penal, como para recibirle declaración indagatoria. Por ello, y a ese fin, se revocará parcialmente el sobreseimiento adoptado a su respecto en el punto I. Idéntica solución merece el tratamiento de las situaciones procesales de Ariel Fernando Olivetti, Carlos Trillo y Fernando Ariel Sánchez, quienes habrían colaborado con un proyecto de su autoría con la revista Mega, cuando tales proyectos habrían sido vendidos anteriormente a Editorial Atlántida para la revista Billiken, motivo por el cual también deberá recibírseles declaración a tenor del artículo
294 del Código Procesal Penal. Por ello, el Tribunal resuelve (…) DECRETAR EL PROCESAMIENTO, SIN PRISION PREVENTIVA, de Pablo Daniel Colazo, de Ricardo Armando Pulgar, de Héctor Eugenio García Blanco y de Liliana Marta Gioia por considerarlos, prima facie, coautores penalmente responsables del delito previsto en los artículos 71 y 72, inciso a) de la ley 11.723, TRABANDO EMBARGO sobre los bienes o dinero de los nombrados hasta cubrir la suma de $ 240.069, 67."
LO QUE CLARIN NO DICE. En su artículo del 3 de diciembre, Clarín afirma que "Atlántida demuestra haber encontrado en una sentencia lo que la sentencia en verdad no contiene, pero que naturalmente quisiera que tuviese".
RESPUESTA: No es necesario que Atlántida "encuentre en una sentencia" algo que está frontal y palmariamente resuelto por el Tribunal: procesamiento y embargo de los imputados por ser coautores responsables de un delito".
Dice Clarín textualmente que "La nueva sentencia sólo ordena que se continúe con el juicio".
RESPUESTA: Eso significa, nada menos, que el Tribunal considera y acredita la existencia de pruebas lo suficientemente contundentes como para ordenar la continuación del juicio. Si no fuera así, ¿qué sentido tendría seguir un juicio sin argumentos sólidos y convincentes? La sola orden de continuar ese juicio indica claramente que la justicia tiene algo más que indicios para no dar por cerrado el caso.
Dice Clarín que sus revistas tienen siempre el mismo formato: 23 por 27,6 centímetros, y que Atlántida utiliza otros formatos, ninguno igual al de Clarín. De allí que no haya argumento para explicar por qué el supuesto proyecto Mega podría haber tenido un formato similar al de, por ejemplo, Viva.
RESPUESTA: La escasa experiencia del Grupo Clarín en el segmento de revistas le hace pensar (y peor: creer) que las editoriales, inevitablemente, editan sus revistas con un formato único. Esa suposición revela que Clarín no entiende algo elemental en esta industria: que el formato se subordina al contenido que elige el editor para llegar mejor a sus lectores. Como ejemplo (entre las decenas que jalonan la historia del mercado de revistas), vale el de la exitosa revista PARA TEENS, que salió en octubre de 2003 con un innovador formato: 23,5 por 17,2 centímetros, nunca antes usado por Atlántida. Por lo demás, basta mirar un kiosco para comprender que el argumento de Clarín sobre formatos no resiste análisis.
Dice Clarín que "el éxito siempre les duele a los perdedores", y publica como supuesta prueba del éxito de Genios, que Billiken vendía 107.000 ejemplares semanales en 1997 y hoy vende un promedio de 56.000.
RESPUESTA: Es cierto: Billiken vendía 107.000 ejemplares semanales en 1997 y hoy vende un promedio de 56.000 (-47 por ciento). Tan cierto como que Genios vendió 213.648 ejemplares en 1998, pero este año apenas alcanzó los 82.000 ejemplares semanales promedio (-62 por ciento). Y tan cierto también como que a lo largo de 2004 perdió 10 puntos de share (participación de mercado), que pasaron a manos de Billiken.
Dice Clarín que el proyecto Mega, de Atlántida, jamás existió. Que lo que pasó es que algunos periodistas e ilustradores de Billiken fueron contratados por Clarín.
RESPUESTA: Más allá de esas sugestivas contrataciones (¿por qué, si Genios ya estaba lista para salir y convencida de su futuro liderazgo, contrató a periodistas y dibujantes de una revista y una editorial "perdedora"?), no es necesario argumentar nada más: al respecto, el fallo judicial es clarísimo, rotundo, y sostenido por el procesamiento y el embargo de ese grupo de "ganadores".
Dice Clarín que "no ha copiado a nadie. No le hace falta".
RESPUESTA: La Editorial Atlántida fue fundada en 1918 (es decir, 27 años antes que Clarín). A lo largo de sus 86 años en el mercado de revistas publicó más de 50 títulos. Muchos de ellos sirvieron de inspiración a otras editoriales de revistas, que crearon marcas destinadas a los mismos targets a los que apuntó Atlántida. Jamás, en esos 86 años, debió comparecer ante la justicia por una acusación de plagio como la que hoy enfrentan Clarín y su revista Genios. Y ninguna empresa seria, tradicional, exitosa, premiada muchas veces por sus productos (varios, declarados de interés nacional), como Atlántida, lleva adelante un juicio a lo largo de seis años si no tuviera la convicción de que le asisten razones, porque se expondría a una vergüenza pública absolutamente opuesta a sus principios y a su historia. Billiken, con más de ocho décadas de vida y única en su tipo desde su fundación y hasta no hace mucho, enseñó, instruyó y entretuvo a millones de c
hicos de toda América latina. ¿Hace falta decir algo más? No. Porque el juicio, como bien lo dice el fallo (y también Clarín en su artículo) continúa. A buen entendedor, pocas palabras bastan.
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Mega, era el plato fuerte que acompañaría a la primera edición de Billiken de marzo de 1998 -inicio del período escolar-, donde la revista se jugaba el liderazgo de todo el año. Su ex director, Pablo Colazo, antes de pasar a Clarín, dijo que el proyecto era "poco atractivo…", pero salieron un mes después de su renuncia, ¡en Genios!
Mírelas bien. El mismo dibujo, idéntica disposición de los títulos, los mismos temas, el logo con tipos de máquina de escribir puestos sobre placas de colores… No cabe duda: la tapa de Mega fue hecha en Atlántida y costó, junto al resto del proyecto, un año de trabajo. A Clarín le resultó mucho más fácil lanzar Genios y la Enciclopedia Saber Hoy (también de Atlántida): se apropió de todo con malas artes, como hoy acaba de confirmarlo la justicia.
