Que sí. Que no. ¿Y por qué no? Diez días antes se decidió: lo haría. La fiesta fue en el caserón del exclusivo y paquete Barrio Parque que construyó hace años. Contrató a Rodolfo para que le haga las pizzas caseras, encargó champagne Chandon, compró velones blancos, liliums y azucenas, globos rojos y fucsias (sus colores preferidos) para la decoración, masas y tortas para la mesa de dulces. Así recibió a sus cuarenta invitados en la noche del martes 11 de julio.
Esa mañana despertó con el beso de Giuliana (su hija de 17) y de Gianni (su varón de 15). Enseguida se dedicó a supervisar todos y cada uno de los detalles: convirtió el comedor en una gran pista de dance, redecoró el living y armó un espacio junto a la piscina iluminada. Pasó a buscar el vestido: un diseño exclusivo que había dejado en manos de su amigo Jorge Ibáñez. También la torta: un regalo del hotel Four Seasons que el chef pastelero Santiago Marafuschi le preparó especialmente con la leyenda “Life begins at 40” (“La vida comienza a los 40”). Entonces, todo era cuestión de que se hicieran las nueve de la noche y el timbre comenzara a sonar. Marcela Tinayre, amiga y vecina, fue una de las primeras en llegar. Julia Zenko, Marcelo Polino, María Eugenia Ritó, Beatriz Bonnet y Jorge Rodríguez completaron la lista de famosos. El resto, familiares y esos amigos de toda la vida. El coreógrafo Raúl Martorel sorprendió con su regalo: llegó con su grupo de dance, que enseguida se encargó de animar la fiesta con su baile y voz. La música fue toda ochentosa.
Más regalos: Gabriel Olivieri cayó con una reproducción en miniatura de los zapatos de Manolo Blanik, los mismos que usó Carrie, su actriz favorita en Sex and the City. También hubo libros, ropa, accesorios, zapatos y carteras. Pero el mejor, según ella, fue el clima. “Siempre llueve o es el día más frío del invierno. Por primera vez, hizo calor y pudimos pasar la noche en el parque. La verdad, tuve el cumple que siempre soñé”, dijo poco antes de las cinco de la mañana, hora en que apagó las luces para ir a dormir.
Baile sensual en el living-comedor de su residencia junto al líder del grupo dance de Raúl Martorel.
Frente a la torta, un regalo que le hizo el pastelero del Four Seasons, con la leyenda “La vida empieza a los 40”.
