Los últimos minutos de la final del Torneo Panamericano de Handball fueron para el infarto. En las tribunas, la gente se abrazaba con los goles criollos y se agarraba la cabeza con cada tanto del equipo brasileño. En el último segundo,
Argentina -que terminó el torneo invicta- superó por un gol a Brasil y el 22-21 le aseguró la gloria. Entre los jugadores que dieron la vuelta olímpica en el estadio se encontraba un tal Martiniano Molina (29), con el número tres en la espalda. El nombre, inconfundible, como su metro 94 y su sonrisa. Martiniano, a secas, es el chef que todos los mediodías, junto a Mariana Fabbiani, da cátedra culinaria en el programa
Mariana de casa. El mismo que hace suspirar a más de una, en la cocina tiene también sus fans en handball.
-Un as de la cocina, un hombre de la tevé y un deportista de alto rendimiento… ¿Cómo hace?
-Soy un cocinero de toda la cancha (risas). Le pongo mucha energía a todo lo que hago. A cada cosa le dedico en su momento el ciento por ciento de mí.
Martiniano vive en Quilmes con Eleonora, su esposa, y esperan su primer hijo. Además de estar todos los mediodías en la pantalla de Canal 13, conduce el programa
Martiniano Express por Gourmet, escribe un libro de recetas, es la "imagen gastronómica" del Bar de Boca, participa en el programa de radio de Néstor Ibarra, da clases en el colegio de cocineros del Gato Dumas… A esto se suman sus entrenamientos de handball, deporte que practica desde los 22 y que lo llevó hasta Italia, donde en el 98 rechazó una importante oferta para integrar el seleccionado italiano.
-Molina, ¿cuántas horas tiene su día?
-Mirá, se trata de disfrutar de lo que uno hace. Mi terapia es la relajación. Hago yoga y cada día me reservo un momento para practicar técnicas de respiración. Ese es mi secreto para estar bien y poder ponerle onda a todo lo que hago. En la tele como en la cancha, gozo de darle alegría a la gente.
-¿Y cuál considera que es la faceta que lo convirtió en un sex-symbol?
-Eso no debería decirlo yo.
Las dos caras de Molina: estrella en Mariana de casa y campeón de handball. Como chef, dice que las recetas afrodisíacas no existen. Y en el deporte, afirma que todo se basa en el sacrificio.
El domingo 14, Molina se dio el gusto de levantar junto a sus compañeros la copa del Torneo Panamericano de Handball. Y nada menos que derrotando a Brasil. En la tele no se queda atrás: trabaja junto a Mariana Fabbiani en Canal 13, y en cable tiene su propio programa.
