«Sé que en algún momento vamos a volver por el Oscar» – GENTE Online
 

"Sé que en algún momento vamos a volver por el Oscar"

"La alfombra roja: el único lugar donde hay que estar". La legendaria Joan Rivers lanzó la frase entre sus miles de dientes blancos (se sabe, en Hollywood todo es excesivo) y en directo para la cadena E! Entertainment. Y no se equivocaba: TODOS estaban
allí. Jon Voight que declaraba que estaba orgulloso de ser abuelo y de que su hija Angelina Jolie tenga "un gran corazón para haber adoptado un bebé"; Glenn Close que entraba rápido porque debía conducir el backstage de la entrega; Russell Crowe, que con su nominación como mejor actor saludaba con su media sonrisa a Halle Berry, premiada luego como mejor actriz; Sharon Stone cada vez más impactante y, según rumores, con una pequeña cirugía; Travolta que se codeaba con Denzel Washington; Jodie Foster con un Armani brillante; y entre los grandes, Laura Harring -de la película Mulholland Drive-, quien para pisar la deseada alfombra roja llevó unas sandalias de un millón de dólares (sí, leyó bien) y un collar de diamantes que hacía juego, de 27 millones.

Nada es demasiado en Hollywood para llegar al Oscar.
Sobre esa alfombra roja, convertida en la gran pasarela de la fama, de pronto estuvo Adrián Suar. Y junto a él, Ricardo Darín, Norma Aleandro (quien ya la había transitado otras veces), el director y guionista Juan José Campanella y el coguionista Fernando Castets. Cinco argentinos que fueron aplaudidos y reconocidos entre miles de caras famosas por haber llegado a los Estados Unidos con El hijo de la novia. Ellos pisaron esa alfombra luego de bajar de una interminable limo negra, pasar el detector de metales (11 mil policías de Los Angeles custodiaron la entrega), cruzar frente a las cámaras de los 221 periodistas acreditados (casi 1.500 habían pedido credenciales) y escuchar a Joan Rivers, que repetía:
-The red carpet: the only place to be
Y entonces se dieron cuenta de que nada es un sueño. Que estar de smoking a las tres y media de la tarde no era algo extraño en esa hoguera de vanidades, talentos y glamour. Y que ellos eran parte de ese mundo.

por Gabriela Cociffi
fotos: Alejandro Carra
(enviados a Los Angeles)
Fotos del Oscar: Pablo Grosby, desde Hollywood, especial para GENTE.Adrián Suar se alojó en el Regent Beverly Wilshire, el hotel donde se filmó gran parte de Mujer Bonita. Allí, la habitación cuesta 500 dólares por noche. El domingo, a las 14 horas, comenzó a prepararse para la 74ª entrega de los Oscar.

Adrián Suar se alojó en el Regent Beverly Wilshire, el hotel donde se filmó gran parte de Mujer Bonita. Allí, la habitación cuesta 500 dólares por noche. El domingo, a las 14 horas, comenzó a prepararse para la 74ª entrega de los Oscar.

Kodak Theatre, Los Angeles. La troupe argentina de la nominada El hijo de la novia pisaba la tan ansiada alfombra roja. Adrián Suar -de smoking Giorgio Armani y zapatos Gucci-, Norma Aleandro -elegantísima, de negro (el color de los Oscar 2002), signé Elsa Serrano, anteojos negros en mano cual diva-, Ricardo Darín -de Armani, con camisa de traje y corbata-, el director Juan José Campanella -también con corbata- y el coguionista Fernando Castets irrumpieron en la gran fiesta del cine.

Kodak Theatre, Los Angeles. La troupe argentina de la nominada El hijo de la novia pisaba la tan ansiada alfombra roja. Adrián Suar -de smoking Giorgio Armani y zapatos Gucci-, Norma Aleandro -elegantísima, de negro (el color de los Oscar 2002), signé Elsa Serrano, anteojos negros en mano cual diva-, Ricardo Darín -de Armani, con camisa de traje y corbata-, el director Juan José Campanella -también con corbata- y el coguionista Fernando Castets irrumpieron en la gran fiesta del cine.

Más información en Gente

   

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig