Zulemita Menem y Paolo Bertoldi de jueves a domingo. Jueves 24: llegada a
Buenos Aires desde Miami. Primera parada: Libertador al 4400, visita a Zulema
Yoma (madre y suegra, en ese orden). Segunda parada: Echeverría 3535, donde
vivirán hasta su partida. Viernes 25, once de la mañana: salida de Echeverría en
la Toyota negra 4x4 de Zulemita. Al volante: Paolo. Destino: la agencia Toyota
Núñez (Figueroa Alcorta y Quinteros, frente a la cancha de River). Zulema Yoma
llega poco después. Dos de la tarde: piden delivery a Comidas caseras, un local
cercano: cuatro pechugas de pollo, ensalada de papas, un filete de merluza, agua
mineral. Zulemita, Zulema y Paolo se quedan, a puertas cerradas, en la oficina
de la agencia: ¿charla de negocios? Tres y media: Paolo se va en el auto de
custodia de Zulema por la salida de Quinteros (maniobra para distraer a la
prensa). Unos minutos más tarde llegan los padres de Gabriela Sabatini: breve
charla con Zulema y Zulemita. Después, madre e hija parten para Libertador (la
casa de Zulema). Piden helado a Persicco. El pedido llega a las seis de la
tarde. Ocho de la noche: Zulemita y Paolo vuelven a su casa de Echeverría.
Viajan en autos separados. Zulemita adelante, Paolo detrás. Sábado 26: almuerzo
en la casa de Zulema y vuelta a Echeverría. Domingo 27: frío, lluvia: la pareja
no sale en todo el día… Rebobinado: sábado, cuatro de la tarde, GENTE con
Zulemita, exclusivo. Así:
-Primeros días de casada… ¿Balance?
-Con Paolo somos muy felices. Vine a visitar a mi mamá porque la extraño mucho.
A ella, y al país también…
-¿Es cierto que van a vivir en la Argentina?
-No… Por ahora estamos radicados en Miami.
-¿Por qué?
-Porque Paolo vive allá hace mucho tiempo, de modo que es lo más lógico.
-¿Miami será el hogar-hogar? ¿Una familia con hijos y todo?
-Con Paolo ya somos una familia. Y nuestro hogar estará donde estemos. Uno hace
a los lugares, y no al revés…
-¿Ya está en marcha el primer hijo?
-No.
-¿Para cuándo?
-Lo tendremos cuando Dios lo disponga.
-¿Pero lo están buscando?
-Eso no se busca: hay que esperar la mano de Dios.
-Paolo marido: ¿cómo es?
-Hace muy poco que estamos casados…
-Para una primera visión, alcanza…
-Es muy buena persona, tiene un gran corazón, y nos entendemos muy bien. Pero lo
más importante es que estamos… ¡e-na-mo-ra-dí-si-mos!
-¿El amor de tu vida?
-¡Por supuesto! Paolo es el amor de mi vida. Con todas las letras. Si no fuera
así, no me habría casado.
-Se habló de la ausencia de tu padre en la boda…
-Es que éramos muy pocas personas. Fue una boda íntima, tranquila, divina… Habrá
tenido sus razones para no ir, supongo. Pero el día del casamiento me llamó por
teléfono. ¿La relación con mi padre? Seguirá bien. Las cosas importantes están
en manos de Dios, y en ellas hay que dejarlas…
- ¿Cuáles son tus planes inmediatos?
-Aquí tengo mi empresa, de manera que voy a venir todo el tiempo que pueda,
siempre y cuando mi vida matrimonial me lo permita.
-¿Paolo acepta que vengas y vayas continuamente?
-Sí. Es muy comprensivo. Además, mientras no hay hijos, todo es más fácil.
Después, ya veremos. Ya nos acomodaremos…
-¿Por qué Paolo se escapa de los periodistas?
-¡No le gusta! ¡No está acostumbrado! Esto es muy nuevo para él. Le gusta la
privacidad, y hay que respetar esa decisión. Toda su vida vivió tranquilo, y
quiere seguir así.
-¿Qué comentó sobre la relación casamiento-prensa?
-Le pareció que hubo mucho respeto, y también cariño.
Zulema Yoma: -¡Qué fotos!
-¿Le parecieron demasiado apasionadas, Zulema?
-Sí… Pero después de todo, los chicos estaban en su derecho. ¡Son marido y
mujer!
-Zulemita, ¿cómo ves a Kirchner?
-Nunca hablo de política. Pero ojalá Dios lo ilumine. Los argentinos son muy
luchadores y muy sufridos, y se merecen un gran país.
-Ultima: ¿realmente no estás embarazada?
-No. Si fuera cierto, ¿por qué iría a ocultarlo?
-¿Te gustaría?
-¡Me encantaría ser madre! ¡Me encantaría!
-¿A quién quisieras que se pareciera tu hijo… o tu hija?
-Quiero que mi hijo se parezca a Paolo. A Paolo, con toda el alma y de todo
corazón.
Es un hombre muy apasionado", explica ella. En la mano de Paolo, un regalo para su suegra.">
Puerta del departamento de Zulema Yoma. Paolo le roba un beso a Zulemita. "Es un hombre muy apasionado", explica ella. En la mano de Paolo, un regalo para su suegra.
Sábado a la noche: Paolo, Zulemita, Mónica Gostanián y su marido, Fernando: cena en el restaurante José Luis (Recoleta).
