Se la puede presentar como actriz, como conductora de tevé o como conejita de Playboy. Cualquiera de esas clasificaciones son más que apropiadas a la hora de definir a Pamela Echandi. Nacida hace 24 años en Victoria, al Norte de Buenos Aires, esta multifacética chica busca abrirse camino dentro del espectáculo criollo a su manera: sin escándalos, con mucha preparación y sin restricciones.
Actualmente se destaca en La curva de la felicidad, obra que estelariza junto a los actores Adrián Yospe, Lionel Campoy, Eduardo Carrera y Alejandro Müller. Además, es conductora del ciclo Equipment que se emite por El Garage TV, y está en tercer año de teatro, con el maestro Carlos Evaristo. Pero su camino a la fama comenzó hace 2 años, cuando aún era estudiante de Nutrición y había hecho unos pequeños papeles en comedias musicales infantiles. Es que en 2006 fue conejita de Palyboy, y ya nada fue igual en el universo de Pamela.
Tiene un objetivo claro: crecer dentro de un ámbito muy difícil. Para eso apuesta a su preparación actoral y a su década en danza clásica y jazz, y rechaza el escándalo. "No comparto la idea de hacer un test de embarazo en vivo en un programa, tampoco quiero tener fama instantánea y momentánea por estar en un reality, y mucho menos hacer notas por inventar escándalos. Quiero que me conozcan por mis trabajos, palpables y comprobables”, afirma. Chica de carácter fuerte, dice lo que piensa y no esconde nada.
–Sos multifacética. ¿Cómo te definirías?
–Soy actriz, pero creo que el rol de conductora lo cumplo muy bien. Los trabajos de modelo los hago porque son cosas que están buenas, siempre tengo muchas propuestas y dejan ganancia. Pero lo que más me interesa es el teatro.
–Pasaste de hacer obras infantiles a un desnudo en revista Playboy. ¿A qué se debió el cambio?
–Siempre hice danzas, desde chiquita, y un día me llegó la propuesta de participar en obras infantiles y acepté. Mientras estaba con eso, estudiaba Nutrición en la Facultad de Medicina, pero me dí cuenta de que eso no era lo mío. Y, luego de un año de teatro, me llamaron de Playboy, y acepté, pero sin tener la magnitud de lo que era ser una conejita de. Y eso me sirvió mucho. Por ejemplo, después en los castings y desfiles me trataban distinto, y para otros trabajos, también me facilitó las cosas. Pero ahora no apunto a eso, sólo aceptaría ser chica de tapa, no otra cosa.
–¿Es necesario desnudarse para ser conocida?
–No. Y no lo hice con ese objetivo. Es distinto lo que ocurre en Estados Unidos, donde las playmates son súper estrellas y ganan mucha plata, y acá no es así. No creo que para ser famoso haya que desnudarse o salir en los programas haciendo escándalos. Esa no es mi idea al menos, y si bien hago fotos en revistas de hombres, es por mi imagen, pero puedo vivir sin hacer fotos de ese estilo.
–¿Cuál es tu objetivo dentro del ambiente artístico?
–Quiero seguir creciendo es este ámbito. Me gustaría hacer alguna obra en el teatro, pero para llegar hay que hacer algún escándalo, y estar en los programas de chimento, y eso no me va, entonces no me surge nada. No me gustaría que me llamen por hacer algo de ese estilo, sino que me reconozcan por lo que hago. Tampoco es que quiero ser Leticia Brédice, pero si estar en algún Patinando, Bailando, eso es lo que me hace feliz.
–¿En que rol te sentís más cómoda: como conductora, como actriz, o como conejita de Playboy?
–En lo que menos cómoda me siento es en las fotos, me ponen muy nerviosa. Como conductora estoy muy bien, pero lo que me gusta mucho es el teatro, porque es muy lindo ver el feedback que hay con la gente.
–¿Cómo es tu papel en la Curva de la felicidad?
–Hago de una vecinita, muy inocente, que está enamorada de Nino, pero como él se está separando, no le da ni la hora. Pero cuando se da cuenta de lo que ella siente por él, todo cambia.
–¿Qué es lo que más te gusta del ambiente?
–A medida que conozco más, me doy cuenta de que hay de todo, y mucho chanta dando vueltas. Te prometen cosas que después no se cumplen, y eso te desilusiona. No se valora el trabajo de las personas, pero si un escándalo. Igualmente disfruto de salir al escenario, o de pararme enfrente de una cámara. No inventaría algo para hacerme famosa, pero si me buscan, me encuentran.
–¿Hay algo que te gustaría que te ofrezcan?
–Mi sueño es salir en Playboy Estados Unidos, conocer a Hugh Hefner y estar en la mansión. También me gustaría hacer una obra de verano y estar en el programa de Marcelo Tinelli, porque te dispara como artista.
–¿Qué es lo que más disfrutás de tu trabajo?
–Hacer lo que me gusta. Si hago algo que no siento, me pongo mal. Trabajar de lo que quiero me llena. Desde hacer notas, fotos, grabar mi programa, o hacer la obra, todo me gusta. Todo lo hago profesionalmente y lo defiendo a full.
–¿Y qué es lo que más te gusta de vos?
–Rescato mi carácter, que es fundamental en este ambiente, para superar todo lo que se presenta. En lo físico, me gusta mucho mi cara, es natural, no tengo operaciones y la cara no se hace con cirugías.
–¿Cómo haces para cuidar tu físico?
–Voy al gimnasio, hago un circuito dividido en estaciones, que hago cuatro veces por semana, y trabajo todos los músculos. Además, me cuido mucho en las comidas.
–¿Qué tiene que tener un hombre para seducirte?
–Hay veces que me fijo en lo físico, pero si después me invitás a salir y no tenés nada en la cabeza, no va. La personalidad es lo más importante, porque tampoco me gustaría un chico que me saque la planchita. Que sea divertido, me haga reír y disfrutemos tanto de una salida, como de de quedarnos en casa mirando una película.
–¿Tenés límites a la hora del amor?
–No. Soy una persona muy apasionada y doy todo cuando estoy enamorada.
–¿Y alguna fantasía por cumplir?
–Muchas por cumplir no me quedan, porque cuando tengo alguna, la cumplo. Si se me ocurre algo en el momento, se cumple. No me guardo nada.
–¿Creés en la fidelidad de la pareja?
–Sí, cuando estoy con alguien soy muy fiel. Y si no estoy de novia tampoco ando a los besos por ahí. No me gusta eso de ir a un boliche, conocer a alguien e irme con esa persona. Me gusta estar con alguien de verdad, construir algo y estar en serio.
–¿Qué es lo que más elogian los hombres de vos?
–¡La cola! Si bien tengo mis lolas, no son exuberantes, pero la cola es lo que más me halagan.
–¿Cuáles son tus planes para el futuro?
–Mi sueño es crecer en esta profesión, que me tomen en serio a nivel profesional y tener buenas propuestas para hacer una carrera seria dentro de lo que a mí me gusta. A nivel personal quiero irme a vivir sola, porque estaría muy bueno.
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"En lo físico, me gusta mucho mi cara, es natural, no tengo operaciones y la cara no se hace con cirugías", dice Pamela.
Para estar siempre en forma, Pamela va al gimnasio y se cuida en las comidas.
¡La cola! Si bien tengo mis lolas, no son exuberantes, pero la cola es lo que más me halagan. Si ella lo dice...
Pamela es conductora de Equipment que se emite por El Garage TV, y además, actúa en La curva de la felicidad.
Sueña con estar en la famosa mansión de Playboy, y con participar de Patinando, o Bailando...
