Estaban solos. Los dos. Muy 'animados'. Pampita -cuyo nombre es Carolina
Ardohain- iba de jeans muy ajustados, con botas de cuero negro, punta y hebilla.
El pelo negro y suelto con algo de crema humectante. Se sacó una chaqueta tejida
con cuello de piel y quedó con un top de media manga. Se notaba contenta.
Gesticulaba con ambas manos. Llevaba pulsera de fantasía. Y sonreía, muy a
gusto, mientras Gonzalo Valenzuela -de camisa negra, pantalón gris, zapatillas
de básquetbol rojas y chaqueta de motociclista en imitación de cuero de colores-
no le quitaba la vista y demostraba su entusiasmo acercándose a la modelo. El
bebía una cerveza Austral y pedía un caldillo marino. También le tocaba el pelo
a Pampita, quien sólo tomó una Sprite light y seguía el relato de su nuevo amigo
con atención. Estaban solos. Los dos. Y muy 'animados'."
No es el primer párrafo de una novela, la primera escena de un culebrón ni el
inicio de un programa de chimentos. Se llama introducción, la escribió el
periodista Cristián Farías, apareció el domingo en la portada del prestigioso
diario La Tercera (bajo el título "La animada velada de Gonzalo
Valenzuela y la modelo top Pampita" y luego del copete "A la una de la
madrugada del viernes el actor de la teleserie Hippie y la figura sensual
argentina se reunieron en el bar Liguria"), y acaba de cruzar los Andes con
la furia de un rumor inmanejable y la potencia de una noticia de tapa: ¿Qué pasa
entre nuestra diosa y el galán extranjero?
NOCHE DE MIRADAS Y CARABINEROS. Arranquemos por la madrugada del
viernes 2 de julio en el restaurante Liguria, sucursal Luis Thayer Ojeda.
Entraron juntos y solos a la medianoche. Charlaron un rato. Sonrieron bastante.
"Ella lo observaba atenta, apenas pestañeando. El, a veces se quedaba en
silencio y observaba el horizonte, igual que si a ratos estuviera personificando
determinado rol", relató un comensal cercano, que supo de Pampita después de
verlo a Gonzalo Valenzuela. "Claro que cuando descubrió al paparazzo,
Valenzuela estalló en gritos", agregó, contando que el altercado incluyó a
los mozos del lugar y a algunos carabineros, que acudieron veloces para aquietar
las aguas. Al mismo tiempo, la top, esquivando cualquier clase de discusión,
había dejado el lugar, esperando afuera la salida de su compañero. Pero, ¿quién
es el famoso Gonzalo Valenzuela?
Pegó el grito un 28 de enero de 1978 y es el menor de cuatro hermanos, nacido
tras Luz Francisca, coronada Miss Mundo Chile en 1996, Mariana y el mayor,
Fernando, quien falleció en un accidente y de quien heredó su pasión por la
actuación. Estudió en el colegio Mayflower School. Luego, comunicación
audiovisual y teatro en la Escuela de Fernando González, especializándose en
acrobacia y danza. Trabajó en varias obras de teatro y series de televisión.
Entre aquellas, Sinvergüenzas, que lo lanzó al estrellato en el 2000, una
temporada antes de grabar el programa Machos, anterior a Hippie,
ciclo que le valió el sobrenombre de macho hippie (mide 1,90) y lo
consagró como uno de los actores más cotizados del país. Para rematar y anotar,
una de sus últimas frases sobre el estilo de damas que le atraen: "Me gustan
la mujeres introvertidas, observadoras, de pelos largos y buenos trastes…"
PALABRAS MAS, PALABRAS MENOS, SIN PALABRAS. Ni el mismo Gonzálo, en
Santiago, ni el propio marido de Pampita, Martín Barrantes, en Buenos Aires,
levantaron el tubo del teléfono para ratificar o rectificar el sonoro murmullo.
El único que tomó la posta fue Pancho Dotto, manager y artífice de la diosa, que
cruzó la cordillera el lunes a la mañana, dentro del vuelo 1282 de Aerolíneas
Argentinas. "No vine acá para aclarar nada -contestó-. Vine para
juntarme con la gente de Los Rodríguez Producciones Limitadas, y cerrar
la participación de Carolina en el filme 4º C. Sé que ella llegó el viernes con
la idea de festejar los cuatro años de Fortuna, la hija de sus amigos Oriana y
Emiliano, y de participar de la citada reunión. El rodaje arrancaría durante
febrero. ¿De Gonzalo Valenzuela? Me comentó que lo conoció durante el Festival
de Viña, que es un amigo suyo y un chico bárbaro, que el lugar donde tomaron
algo es visitado continuamente por la farándula, que le inventan romances para
perjudicarle la carrera y que su matrimonio está pasando un excelente momento",
redondea Dotto informando que Pampita evitaría todo tipo de declaraciones y
dejará sin respuestas el cuestionario preparado por GENTE, el básico y lógico
cuestionario preparado por GENTE:
-¿Sabía de antemano su marido que había salido a tomar algo con el
"Mariano Martínez chileno"?
-…
-¿Y qué pensaría usted si Martín Barrantes hubiese aparecido fotografiado
en un medio internacional, tomando algo y sonriendo con una bella dama?
-…
-¿Cómo le explicó el incidente?
-…
-¿Por qué nunca aclara los temas que comprometen o perjudican?
-…
-¿Qué le responde a quienes afirman que hace un mes dejaron de convivir?
-…
-¿Es verdad que el domingo, volvió a verse con Gonzalo Valenzuela y que
comieron empanadas de mariscos en la playa Papudo, a 170 kilómetros de Santiago?
-…
Pampita no contestó nada. Pero los chilenos que la vieron -los vieron- en la
playa, sí. Y dijeron: "Ella estaba lindísima y sonreía; él se mostraba
seductor y muy 'animado'".
Sábado, 12:55 AM. La top argentina y el actor chileno comparten la velada y cierto acercamiento en el bar Liguria, de Santiago. Unos minutos después, el actor descubrió al fotógrafo, hubo tumulto con carabineros, y partieron.
Carolina hace un mes en la Polinesia francesa, donde condujo un especial para E! Entertainmet Television, se lastimó la planta del pie derecho con un coral y recibió la continua asistencia de su marido, el empresario y polista, Martín Barrantes.
