Acaban de dar las tres de la tarde del jueves 1º de abril cuando Zulemita
entra en la sala de conferencias del Sanatorio Otamendi y Miroli. Lleva a Luca
en brazos y camina con dificultad; como siempre, su madre la acompaña. Zulemita
sonríe y posa para los flashes; después, se sienta, mira hacia el auditorio
repleto de periodista y comienza a hablar: "El parto fue bárbaro; quiero
agradecerle al sanatorio, a los médicos, a todo la gente que se acercó y nos
brindó su apoyo, y sobre todo a mi mami, que estuvo conmigo en todo momento".
Todavía sensible por el parto, se emociona, los ojos se le llenan de lágrimas y
sus palabras trastabillan. Pero continúa: "Luca es divino, super tranquilo. Y es
un clon del padre, yo lo veo igual a Paolo". Y entonces, la pregunta no se hace
esperar: "Si me preguntan si hay algún problema en mi matrimonio: sí, lo hay; y
son problemas de los que prefiero no hablar. Paolo en algún momento va a venir,
cuando todas las cosas se aplaquen y vuelvan a su curso".
Después del parto, el lunes 29 por la tarde, Zulemita quedó tres días internada
para recuperarse, y recibió las visitas de Diego Maradona, el ex coronel
carapintada Mohamed Seineldín, el Soldado Chamamé, sus tíos Amira y Emir Yoma, y
su íntima amiga Mónica Gostanián. Las ausencias más notorias fueron, por
supuesto, la de su marido, y la de su padre, Carlos Menem. "Mi padre llamó
varias veces para felicitarme y ver cómo estabamos. Mi relación con él es la
mejor, y si no viene de Chile, iremos nosotras para allá para que conozca a su
nieto". Cuando se le pregunta sobre Cecilia Bolocco, responde amable: "Les
vuelvo a repetir, la relación es íntegra con mi padre, que es lo que a mí me
interesa". Pero enseguida retoma el tema de su marido, y se queja de cómo fue
tratado por la prensa: "Primero que todo él es el padre de mi hijo y me gustaría
que fuera respetado. Ustedes lo hicieron príncipe y mendigo, y él no es ni una
cosa ni la otra, como yo siempre dije. Él es simplemente un empresario de buen
pasar y sin ningún problema. No es justo que jueguen así con el honor de una
persona".
Son las cuatro y Zulemita da por terminada la conferencia. Ahora vuelve al piso
de Avenida del Libertador, frente al Hipódromo de Palermo, donde vive desde hace
unos meses con su madre. Juntas decidieron darse "un tiempo de paz". Por eso
atienden muy pocos llamados y dejan que las casillas de sus celulares estén
siempre completas. Pero es la misma Zulema Yoma quien levanta el teléfono cuando
decide responder un mensaje. Y hoy, sábado 4 de abril, tiene la voz de alguien
que, por primera vez en muchos años, ha vuelto a tener un instante de felicidad.
En esta conversaciones informal con GENTE, se confiesa sin disimular su alegría:
"Ahora Luca es la felicidad de la casa. Zulemita se pasa todo el día mirándolo, acaricándolo: está emebelesada, enamorada de su hijo".
Feliz, con su hijo en brazos, la hija del ex presidente Carlos Menem, posa para la prensa antes dejar el sanatorio.
Luca Bertoldi Menem, de tres días, al ser presentado por su madre. El bebé durmió durante toda la conferencia de prensa, primero en brazos de su madre, y después en brazos de su abuela.
