Dolores Barreiro
"Conseguí verme flaca sin perder las formas"
Es la dueña de las mejores piernas de la Argentina, tiene 26 años y un perfecto 90-60-90 increíblemente repartido en su metro setenta y ocho. Después de tener a su hijo Valentino, Dolores consiguió perder esos kilitos de más que deja todo embarazo (incluso a las diosas, claro) y recuperar sus curvas. ¿Cómo lo logró? Se puso en manos del personal trainer de las modelos, Pablo Benadiva, quien le diseñó una rutina de ejercicios explosivos y una guía magra basada en la sobrecarga de proteínas. Desde entonces, perdió los cinco kilos que le habían quedado después de ser mamá, logró marcar al máximo sus abdominales, eliminó el tejido adiposo y tonificó su figura sin aumentar el volumen muscular. ¿La rutina? Tres veces a la semana hace obligatoriamente 45 minutos de ejercicios aeróbicos que combina con los localizados (véase recuadro). A la vez, la dieta de Dolores consiste en
"comer a cada rato" para lograr saciedad, gastar calorías en gran magnitud y tener un cuerpo libre de grasas. "Lo más difícil de seguir es el horario. Reconozco que, al principio, cuesta mucho acostumbrarse a comer tan seguido, pero quienes siguen esta guía saben que el cambio es completo y efectivo como pocos", asegura Benadiva. Después de cumplir con los ejercicios y el plan alimentario al pie de la letra -durante un año y medio-, Dolores logró lo que quería: "Conseguí verme flaca sin perder las formas", afirma la diosa.
Catherine Fulop
"Bajé seis kilos y combatí la celulitis"
Medidas de bomba latina: 92-62-95. Altura ideal: 1,70. El peso justo: 54 kilos. ¿Su edad? Cronológica, 37;biológica, 20. Ella se puso todas las pilas cuando le ofrecieron hacer un desnudo para el teatro. Entonces, Cathy (que hasta ese momento se había dedicado a cuidar y educar a sus dos hijas) empezó con la gym, la dieta y los tratamientos de belleza. ¿El resultado? Está a la vista. No sólo consiguió bajar seis kilos y erradicar la celulitis, sino también modelar, reducir y reafirmar sus curvas. ¿Cómo? Trabajando su cuerpo todos los días con ejercicios aeróbicos (bajo las órdenes de su trainer Verónica Segreto) y de musculación (siguiendo la rutina de Miguel Angel Vielva). Además, hace 45 minutos de spinning en su casa tres veces por semana y toma clases de gimnasia jazz con Ricky Pashkus para estilizar su cuerpo. También visita al doctor Carlos Pisanú, quien la somete a un tratamiento anticelulítico de tres pasos: 1) Corpo 02: acelera el proceso normal de grasas localizadas. 2) Mesoterapia: redu
ce y mejora el poceado celulítico y la microcirculación. 3) Endermologie: descama la primera capa córnea de la piel para cambiar su aspecto. Como si fuese poco, después del baño se hace masajes profundos durante 30 minutos desde el cuello hasta la punta de los pies: usa crema reafirmante para brazos y pecho, reductoras (que contengan vitaminas A y C) para el abdomen y humectantes para brazos y piernas.
Perdió cinco kilos y recuperó sus perfectos 90-60-90, luego del nacimiento de su hijo Valentino, con una dieta magra y una gym explosiva. El resultado: a la vista.
Cathy es un ejemplo para todas: después de dos embarazos y varios años de inactividad, consiguió modelar, reducir y reafirmar sus infartantes curvas. ¿La clave? Constancia, tiempo y dedicación.
