Sufre un poco cada vez que pasa por la mesa del buffet, donde un gran desayuno con budines y medialunas se exhibe para quien lo desee. “Las facturas son mi perdición, pero son lujos que no me puedo dar en medio de una campaña”, asegura Julieta Prandi (36) en plena sesión de fotos para la marca de lencería Peter Pan.
Es que la rubia de 1,73 metros mantiene sus perfectas medidas: 90-58-90 a base de dedicación, esfuerzo y por supuesto, una pizca de genética. “Voy tres veces por semana a Iobella donde hago gimnasia dentro de una cápsula –con calor para las que quieren reducir, pero yo no lo hago porque sólo quiero tonificar–. Después de la clase intercalo con aparatología no invasiva: drenajes, electrodos para darle velocidad al delineado del cuerpo y radiofrecuencia para aportar colágeno y tensar la piel, sobre todo en la zona del abdomen después de haber sido mamá”, revela la modelo y conductora, madre de Mateo (6) y Rocco (2) junto a su marido, el empresario gastronómico Claudio Contardi (49).
¿Dieta? También: “Me cuido con las comidas. Por supuesto que a veces pruebo con una hamburguesa con helado de postre, pero en casos así, al otro día trato de compensar con pollito y ensalada. La alimentación es como la nafta del auto, y uno refleja cómo se alimenta y se cuida, sobre todo a medida que pasan los años”, confiesa.
–¿Cómo te llevás con el paso del tiempo?
–Trato de aceptarme e incorporar cada arruguita que va apareciendo, pero sin dejar de cuidarme.
–¿Cuál es tu postura ante las cirugías?
–Soy más partidaria de lo natural, pero no estoy en contra. Creo que cada uno tiene que buscar su seguridad. Tal vez a una chica con una nariz muy prominente, una cirugía le da más confianza, y me parece perfecto.
–¿Te hiciste alguna estética?
–Me operé sólo las lolas, pero no fue antes de ser mamá. Quise volver a mis medidas después de amamantar a mis hijos para sentirme más segura, armónica, y por mi trabajo ¡porque soy la imagen de una marca de lencería!
–También debutaste en el diseño de ropa interior.
–¡Si! En marzo salió Julieta, mi colección cápsula para Peter Pan que la rompió. Después de tantos años de protagonizar campañas de lencería –desde el 2001 es la imagen de la marca– una aprende de telas, encaje, formas, escotes y breteles. Las mujeres quieren verse lindas, cómodas con conjuntos que las sujeten pero sin apretar, sexys y sensuales. ¡Todo eso tiene mi línea!
Por Maru Cociffi. Fotos: Christian Beliera.
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