La princesita Ariane – GENTE Online
 

La princesita Ariane

Ariane Wilhelmina Máxima Inez. Así se llama la tercera hija de Máxima Zorreguieta y el príncipe Guillermo Alejandro de Orange, cuarta en la línea de sucesión al trono de Holanda.

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Esta vez no habían querido saber el sexo del bebé hasta que naciera, así que el tema era todo un enigma y motivo de ansiedad para la prensa europea. Hasta se habían hecho encuestas para saber qué preferencias tenía el pueblo holandés: ¿querían un principito u otra princesa? Y después de dos mujeres seguidas, la balanza se había inclinado por el varón…

Finalmente, el martes 10 de abril, poco después de las 10 de la noche, Máxima Zorreguieta, princesa de Orange Nassau, dio a luz en el hospital Bronovo de La Haya a su tercera hija: una nena que pesó 4,135 kilos y midió 52 centímetros. El nombre, que no tenían enteramente decidido al momento del parto, lo anunciaron dos días después, una vez que quedó oficialmente registrado (sobre todo para que gente con demasiado tiempo libre no se pusiera a abrir dominios en internet con el nombre de la nueva royal).

TODOS LOS NOMBRES. Ahora, ¿por qué esos nombres? Ariane porque les gustó y además empezaba con “a” como los nombres de sus otras dos hijas: Amalia y Alexia. Wilhelmina, o Guillermina, porque es el nombre de la abuela de la reina Beatriz de Holanda, que reinó entre 1898 y 1948. Máxima, por la bisabuela de la princesa argentina. E Inez por Inés, su tía materna. Ariane Wilhelmina Máxima Inez, entonces, le han puesto a la princesita, que continuó con la tradición de que los herederos directos tienen descendencia del mismo sexo. La reina Juliana, madre de la actual reina Beatriz, tuvo cuatro hijas. La reina Beatriz, a su vez, tuvo tres varones, el mayor de los cuales es Guillermo Alejandro. Y, por ahora, Guillermo tiene tres mujeres, Amalia, Alexia y la recién nacida Ariane. Así que, como ven, la tradición hasta hoy se mantiene.

EL PARTE. Ariane está en perfecto estado, come y duerme muy bien”, anunció Guillermo al día siguiente del nacimiento, el miércoles por la mañana, cuando habló con la prensa. “Tiene la nariz pequeña de los Orange y los ojos bien grandes”, precisó. Y además, contó que Catharina Amalia, la más grande de las princesitas, después de ver a la bebé había corrido hasta donde estaba su madre para asegurarse de que ya no tuviera la panza y “certificar que se trataba del bebé correcto”.

AGENDA REAL. Máxima dejó stand by su agenda a mediados de marzo. Su última aparición oficial, antes del parto, fue el 17 de ese mes en la Escuela de Fin de Semana IMC de La Haya, donde dio una clase sobre microfinanciación (la princesa, después de todo, es licenciada en Economía, egresada de la Universidad Católica Argentina). Después de ese día, dado lo avanzado del embarazo, su obstetra Maddy Smeets le aconsejó que guardara reposo absoluto. Así que durante casi un mes, la princesa se recluyó en la residencia De Hoorsten, en Eikenhorst, a descansar, como para que su embarazo no corriera ningún riesgo. Su madre, María del Carmen Cerruti de Zorreguieta, había viajado a Holanda para acompañarla durante sus últimas semanas de embarazo y, de paso, estar con sus dos nietas.

FAMILIA NUMEROSA. Desde su casamiento el 2 de febrero de 2002, el matrimonio entre Máxima y Guillermo Alejandro de Orange viene siendo más que prolífico. En diciembre de 2003 nació su primera hija, Catharina Amalia. Un año y medio después, en julio de 2005, tuvo la segunda, Alexia. Y ahora, abril de 2007, llegó la tercera. “En los últimos cuarenta años me he llevado bien con las mujeres. Esa experiencia me vendrá genial ahora”, bromeó el príncipe, que se crió entre tías y niñeras.

EL PARTO. Máxima llegó al hospital el martes a la tarde con contracciones intensas y regulares. Y Ariane nació pasadas las diez de la noche, después de casi cuatro horas de trabajo de parto. La princesa pasó sólo una noche en el hospital, durante la cual, la recién nacida sólo se despertó en una ocasión, para comer. Al otro día a la tarde, los príncipes dejaron el hospital con su nueva hija rumbo a su residencia de Eikenhorst, donde los esperaban sus dos hijas más chiquitas y un ejército de niñeras. Allí, la beba pasará sus primeros meses de vida, dará sus primeros pasos, dirá sus primeras palabras, y empezará su vida de princesa.

El encargado de tomar esta primera foto de la bebé fue el propio príncipe Guillermo Alejandro. Izquierda, el miércoles 11, Máxima dejó el hospital Bronovo de La Haya para instalarse en su casa.

El encargado de tomar esta primera foto de la bebé fue el propio príncipe Guillermo Alejandro. Izquierda, el miércoles 11, Máxima dejó el hospital Bronovo de La Haya para instalarse en su casa.

El príncipe Guillermo Alejandro presentó a la pequeña Ariane en sociedad el miércoles 11, al dejar el hospital.

El príncipe Guillermo Alejandro presentó a la pequeña Ariane en sociedad el miércoles 11, al dejar el hospital.

Las otras dos hijas del matrimonio son Amalia, de 3 años, y Alexia, de 1 y 8 meses.

Las otras dos hijas del matrimonio son Amalia, de 3 años, y Alexia, de 1 y 8 meses.

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