Hace un mes que María del Carmen Valenzuela (46) elegía el silencio público:
"Hasta que retome el trabajo, no hablo", contestaba mediante su representante,
Marcelo Rey.
"Hasta que retome el trabajo, no hablo", respondía a través del productor de
Porteñas, Daniel Faroni.
"Hasta que retome el trabajo, no hablo", aclaraba por medio de la encargada de
prensa de Costumbres argentinas, Ana Tomaselli.
"Hasta que retome el trabajo, no hablo", desistía acudiendo a la voz de su
psicoanalista Horacio Heilpern.
"Hasta que retome el trabajo, no hablo". se disculpaba ante GENTE pisando el
Instituto de Rehabilitación y Educación Terapéutica de la FLENI.
Pero el domingo a las 22:46 cumplió su palabra: finalizada la función de
Porteñas en la Sala Pablo Neruda del Complejo La Plaza, aún emocionada por el
abrazo de sus compañeras Betiana Blum, Virginia Lago, Susú Pecoraro y Carolina
Peleritti, y aún sorprendida por el aplauso del público, señaló: "Esta es una
función muy linda porque se encuentra parte de los médicos que consumaron el
milagro de Malena (19). Además, le debo un agradecimiento enorme a cada doctor
de la Dupuytrén, a mi analista y a la tribu de amigos. Mi gran deseo es que, de
nuevo, ella se siente ahí, en una butaca, cerquita. Gracias a Dios y a ustedes,
se recupera bárbaro".
Esta es una función muy linda porque se encuentra parte de los médicos que consumaron el milagro de Malena. Mi gran deseo es que, de nuevo, ella se siente ahí, en una butaca, cerquita", dijo María del Carmen el domingo, frente al público de Porteñas y la prensa. ">
"Esta es una función muy linda porque se encuentra parte de los médicos que consumaron el milagro de Malena. Mi gran deseo es que, de nuevo, ella se siente ahí, en una butaca, cerquita", dijo María del Carmen el domingo, frente al público de Porteñas y la prensa.
María Valenzuela visitó a su "angelito" en el centro asistencial de la FLENI sede Escobar.
