Y llegó el programa número 2500… El Gran Rex tiembla. Llenan la sala 3266 personas. De una pasarela entre el público aparece ella, enfundada en un vestido verde esmeralda. Esta vez, el programa dejó los estudios para colmar un teatro. Susana lo quiere así…
El arranque es con humor: un sketch delirante con Emilio Disi, Lucía Galán, Guillermo Francella, Florencia Peña, Miguel del Sel, Humberto Tortonese, Miguel Angel Rodríguez. Susana, con vestido negro ajustadísimo, cinto dorado y moño en la cabeza se tienta, no puede terminar el parlamento, pero sigue. Tanda comercial y primer cambio de vestuario. Ahora luce un vestido de raso verde con cola, y en seguida presenta a "mi amigo, Dady Brieva", quien se hace cargo de uno de sus monólogos preferidos por la diva. Luego aparece entre el público Mamá Cora, el entrañable personaje de Antonio Gasalla. Con ironía, dice: "Susana insiste con bailar. Pero baila con mucha alegría".
Es el momento del musical y ya está toda de blanco, Susana, con un traje ajustadísimo que merece su propio comentario: "¡Este vestido es una calcomanía!". Otro corte, el juego telefónico y Selva -una espectadora de Mendoza- se gana 20 mil pesos. Momento emocionante: Mariano Mores arranca con los acordes de Uno, un clásico de su repertorio, y es nada menos que Charly García quien pone la voz. Le sigue otro instante tan mágico como breve. Ana María Campoy cuenta la anécdota del debut teatral de Susana con Las mariposas son libres y presenta el video de las mejores imágenes de 17 temporadas. Desfilan sus grandes invitados: Ricky Martin, Roger Moore, Liza Minelli, Sophia Loren. Sus amores: Ricardo Darín, Huberto Roviralta, Jorge Rodríguez. Los políticos: Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa. Los freaks, los musicales, los looks, las tapas de GENTE, el Martín Fierro de Oro. Y Diego. Al final, Susana aparece en escena con un vestido de pailletes fucsia
para brindar con sus amigos más cercanos. "Sólo quiero hacerlos reír muchos años más", dice la diva. El público responde con una sola palabra que encierra eterna gratitud por tanta felicidad gratuita: "¡Susana!", "¡Susana!", atrona el Rex.
PARA EL RECUERDO. El primer programa salió al aire el 6 de abril de 1987, a las 13 y por ATC. Por entonces, Susana era la novia de Ricardo Darín y venía de dos grandes éxitos en teatro: Sugar y La mujer del año. Eran los días en que ENTel manejaba -como podía- las comunicaciones telefónicas en todo el país, y ella le propuso al público un programa en el que los llamados fueron el plato fuerte. Nacía ¡Hola, Susana!, una idea importada de Italia, donde Rafaella Carrá arrasaba con su ¡Pronto, Rafaella! Los números de los 2500 programas hablan por sí solos: 48.750.000 dólares en premios, 105 millones de cartas, 19.230.100 llamados telefónicos, 15.200 invitados, 625 estrellas internacionales, 63 musicales, más de 1300 horas de maquillaje, 1850 cambios de ropa. Pero eso ya es historia.
ROMANCE, AMIGOS Y ROCK&ROLL. La noche de los 2500 programas no terminó en el Gran Rex. En limo (como Charly y Brédice) o remise (como Nacha y Solita), todos los invitados partieron al restó El Mercado del Faena Hotel+Universe. Luis Alberto Scalella -el productor de cine a quien los rumores sitúan muy cerca de la diva- llegó solo a las once y media de la noche. ¿Simple cortesía? Ella luce vestido con diseño geométrico y zapatos amarillos. Cenaron lomo acompañado de vino tinto bien añejo. Luego, sin escalas hacia el cabaret del hotel, donde Charly, Nacha, Brédice y Lerner se adueñaron de la zapada mientras la agasajada disfrutaba del momento. A las tres de la mañana la fiesta se dio por terminada. Scalella se fue como llegó, solo. Y Susana, escoltada por amigos que la despidieron cerca de su auto. "Esta noche será inolvidable", dijo.
Era el 6 de abril de 1987, a las 13 y por ATC. Como Rafaella Carrá en Italia, Susana aspiraba a meterse en los hogares argentinos con una fórmula simple pero implacable: entretenimiento, llamados telefónicos y su eterna frescura. Lo logró.
Al cumplir 17 años y 2500 programas al aire, Susana se dio el lujo de celebrar con todo. El lunes, en el Gran Rex, la acompañaron Alejandro Lerner, Solita Silveyra, Charly García, Teté Coustarot, Miguel Angel Rodríguez y Antonio Carrizo, entre otros amigos y compañeros de toda su carrera.
