El juicio de divorcio ya terminó. Faltan solo pequeños detalles. Para la
justicia ya no son marido y mujer: son ex. Pero la semana pasada sorprendieron a
los paparazzi del mundo con un encuentro en Italia. ¿Hay reconciliación?, se
preguntaron todos. Luego de una semana a orillas del Adriático, nada ha cambiado
en la intimidad del matrimonio Maradona.
-Nos encontramos, pero no nos reconciliamos -jura Claudia.
LA HISTORIA DEL REENCUENTRO. El primer acercamiento entre Diego y Claudia Villafañe tras la crisis matrimonial tuvo lugar en Panamá, hace más de un mes. Y
fue justamente para definir los términos del divorcio que hoy se tramita en el
Juzgado Civil N° 77 de Buenos Aires, a cargo de la jueza Marta del Rosario
Matera. No existen fotos de ese encuentro y los detalles del acuerdo sólo son
conocidos por sus protagonistas.
El 26 de agosto Maradona volvió a ser noticia: inauguró la Champions Promenade
de Montecarlo, imprimiendo la huella de su zurda mágica sobre el cemento
monegasco. Una semana después, Diego abordó un avión privado y voló hasta
Cesenático, una exclusiva villa a orillas del Adriático, a 100 kilómetros de
Bologna. Aunque tenía carácter de "secreta", la excursión no pudo evadir a los paparazzi. Pero la guardia superó las expectativas cuando observaron perplejos
que, además de Diego y Guillermo Cóppola, del avión también bajaba… ¡Claudia!
Los Maradona se alojaron en la casa del ex futbolista Salvatore Bagni, una
mansión con piscina, establo, canchas de tenis y fútbol… Cóppola los dejó 24
horas después. Diego y Claudia tomaron sol frente al mar y compartieron muchas
horas en la pileta. Sólo se separaron cuando Diego fue hasta el Golf Club Milano
Marítimo para jugar algunos hoyos. Y Claudia aprovechó para hacer shopping con
la mujer de Bagni. Junto a los anfitriones, también disfrutaron de una cena en
el restó Batija. Al promediar la noche, Diego cruzó su brazo sobre el respaldo
de Claudia y hasta se atrevió a acariciar la espalda de su ex frente a las
miradas de todos. Los mozos todavía comentan asombrados que Diego cenó ("él
solo", juran) un pez espada entero.
Domingo 7 de septiembre de 2003, 10:45 AM. Diego Maradona toma una ducha en el jardín de la casa del ex futbolista Salvatore Bagni, en Cesenático. Claudia Villafañe le alcanza una toalla. Desde que están separados, confiesan los íntimos, han logrado tener mejor relación.
Diego y Claudia compartieron una semana juntos en Cesenático. Solos, sin la presencia de sus hijas ni de Guillermo Cóppola. Sin rencores, se prodigaron algunos mimos y muestras de afecto en público.
