Karina tiene la cola prohibida. Sí, no es chiste. Un contrato que firmó con una marca internacional de cápsulas que supuestamente ayudan a adelgazar, le impide mostrar esa parte tan importante de su voluptuosa anatomía. Pero calma, porque la despreciabl
e cláusula sólo puede ser aplicada en la pantalla de televisión. Y entonces, estimado lector, no impide que usted pueda disfrutarla en estas páginas. Karina Jelinek (23) -92-61-90, ojos verdes, 1,71 metros-, sonríe más que pícara cuando habla del tema, y sube la apuesta y la temperatura con sus definiciones: "Sé que esa parte de mi cuerpo es mi fuerte, pero también que en el mundo represento a la mujer latina, y eso me encanta. Yo me definiría como una chica Baywatch: pulposa, con muchas curvas y una sola cirugía que me hice en las lolas".
Karina está orgullosa de su carrera. Y cuenta entre sus trabajos más destacados el haber sido la imagen de una importante marca francesa de autos en la Argentina, y de la cerveza Paceña en Bolivia. Dice que ahora extendió su carrera hacia los Estados Unidos, donde desfiló para Dolce Gabanna y fue la cara de varios comerciales. Además de estudiar idiomas, baile y canto en esas tierras: "Te cuento un secreto: en Miami me confunden con Catherine Zeta Jones. ¿No está bueno?".
-¿Y aquí no le ofrecieron trabajo?
-Constantemente… Me llamó un grosso como Gerardo Sofovich; también me convocaron Jorge Guinzburg y Nito Artaza. Pero por ahora prefiero esperar. No me gusta ser vedette, no me agrada ese ambiente, prefiero el de la moda. Estudié canto y baile y me preparé para hacer algo más… Me encantaría encabezar un musical. También sueño con ser actriz. Estoy estudiando tres ofertas para participar el año que viene en una comedia en tele. Pero creo que todavía me falta para eso. A lo mejor en un par de años puede ser.
-Hacía un tiempo que no se la veía por la Argentina.
-Es que estuve mucho tiempo trabajando en Miami, desfilando y estudiando canto. Me encantaría ser la Britney Spears latina.
-¿Habla en serio?
-Muy en serio. Te juro que canto muy bien. Ya me van a escuchar, pero por ahora no pienso alejarme de mi carrera de modelo. Me está yendo muy bien en el extranjero.
-¿Cómo se lleva con sus colegas argentinas?
-Bien, aunque, sin faltarle el respeto a nadie, considero que yo no soy una modelo local, sino internacional.
-Las chicas que sólo trabajan acá se van a ofender con lo que dijo…
-¿Por qué? Si lo que digo es verdad. Yo trabajé mucho en los Estados Unidos. Y además, el comercial que hice para la empresa que me prohíbe mostrar la cola se ve en 74 países. No miento... Recorrer el mundo me sirvió para incorporar mucha cultura. Y también para arrasar con los free shop. Me pueden, lo reconozco. Ahora también estoy aprendiendo francés, quiero ser trilingüe, ja, ja...
-Ya que volvió a referirse a su cola, ¿hasta cuándo tiene prohibido mostrarla?
-Por contrato hasta enero, después quedo libre.
-¿Y ahora está libre?
-¿Vos decís en el amor?
-Claro. ¿Por qué siendo chica de tapa nunca se le conoció un romance famoso? ¿Los esconde?
-Prefiero ser misteriosa, reservada. Eso ratonea a los hombres, me encanta romperles la cabeza. Ahora no tengo nada, digamos... formal. Pero más no voy a decir.
-¿En serio está sola? No le creo.
-Y, la verdad es que la soledad no es buena. A veces se siente y mucho. Por eso duermo abrazada a un oso gigante que pasa en mi cama todas las noches.
-¿No preferiría dormir abrazada a un hombre?
-Es que los hombres me tienen miedo, no se me acercan porque piensan que los voy a comer.
-¿No será que usted histeriquea demasiado?
-Y, la verdad es que me gusta jugar un poco con ellos. Pero en el fondo soy una chica del interior, una chichí de Villa María, accesible. No soy una mujer imposible.
por Miguel Braillard
fotos: Santiago Turienzo
producción: Estefanía Allende
agradecemos a Class Life y Ricky Sarkany
. ¿Sus medidas? 92-61-90.">
Karina se define como "una chica Baywatch: pulposa, con muchas curvas y una sola cirugía que me hice en las lolas". ¿Sus medidas? 92-61-90.
, reconoce Karina.">
La cláusula impuesta por un adelgazante que le prohíbe enseñar su cola en tevé vence en enero. "Sé que esa parte de mi cuerpo es mi fuerte, pero también que en el mundo represento a la mujer latina, y eso me encanta", reconoce Karina.
