La noticia sacudió a los íntimos: "El Bamba se separó". Todos sabían que la relación de pareja entre Héctor Rodolfo Veira y Sonia Pepe había vuelto a tambalear tras la reaparición de Sebastián Candelmo, ahora convertido en Malenna. La confirmaci
ón llegaba de boca de uno de sus amigos más fieles, esos que nunca se borraron ni en los momentos más terribles, cuando todo era llanto y dolor. "Sí, muchachos, es verdad. Están distanciados. Ahora tenemos que apoyarlo más que nunca, porque
está muy deprimido".
Para intentar levantarle el ánimo, el último sábado le organizaron un asado pantagruélico en una casa deshabitada y en venta sobre la calle Castro Barros, que pertenece al Turco Jacinto Akil, primo de Carlos Menem. En el búnker, exclusivamente preparado para preservar la intimidad, dijeron presente, entre otros: Enrique Gallo, Jorge Nicastro (director técnico), Jorge Galli (representante de artistas), los abogados Carmen y Pepe García, y Miguel Pierri, el doctor Mendoza, que ofició de parrillero, Osvaldo Chañar, y dos incondicionales: Carlos Gatti y Naná -mano derecha de Oscar Ringo Bonavena en los tiempos de oro-. Dicen que desde hace un par de semanas, Héctor
Veira pasa estas difíciles noches en casa de estos grandes amigos, vecinos del barrio de Boedo.
Consultado por GENTE, el Bambino negó el rumor: "Yo estoy acá, en mi casa, no me separé".
-Hombres que pertenecen a su entorno juran que usted está separado y vive indistintamente en la casa de dos amigos.
-No es verdad. Te repito que estoy acá en mi casa. ¿Entendés?
-Entonces algunos de sus amigos mienten. ¿Su pareja no está atravesando una crisis?
-Eso es otra cosa. No voy a negar que con Sonia estamos pasando una situación difícil.
-¿Por qué denunció a su hija Yanina?
-De eso no voy a hablar. Ah, y agradecé que te atendí.
por Miguel Braillard
fotos: Julio Ruíz
Sábado, 16.45 horas. Héctor Veira se despide del director técnico Jorge Nicastro después de disfrutar un asado entre amigos.
La reaparición de Sebastián Candelmo como travesti habría sido el detonante de la crisis de la pareja Veira-Pepe, que terminó por romperse.
