Ahí está Brad, en algún lugar de la India, cargando maderas, trepado a las vigas con un taladro, llevando un casco, removiendo el cemento… No, nada que ver. No es que en su próxima película vaya a interpretar a un obrero sexy de la construcción ni a un albañil rompecorazones. No. Estas fotos no fueron robadas durante la filmación de ninguna película. Forman parte de la vida real. Lo cual no quiere decir que el galán de Hollywood haya abandonado la actuación para dedicarse a tareas más arduas. No. Lo que muestran son distintas secuencias del actor en plena tarea solidaria en Lonavala, una localidad de la India, donde la fundación del ex presidente Jimmy Carter está llevando adelante un plan de construcción de viviendas. Hasta allí viajó el actor de El club de la pelea con su familia, para prestar sus brazos. Algo que la prensa, por supuesto, no quiso perderse. Así que ya lo ven, ahí está Brad Pitt (42), anteojos oscuros, casco reglamentario, levantando paredes…
Y Angelina Jolie (31) ahí cerquita, mirando a su hombre, cuidando a los chicos, esquivando los flashes...
BEAUTIFUL PEOPLE. Y es que ellos siempre son noticia. Hagan lo que hagan. Digan lo que digan. Vayan donde vayan. Y esta vez es la India, en plan actoral y, ya que estaban, solidario. La idea original era quedarse un mes en Pakistán para filmar A mighty heart, una película producida por Plan B, la compañía de Brad, y protagonizada por Angelina, basada en el secuestro y asesinato del periodista Daniel Pearl a manos de Al Qaeda. Pero el punto de vista que muestra el film no cayó muy bien en ese país: se rumoreó que habían recibido amenazas de la mismísima Al Qaeda, y los Pitt decidieron montar el set de filmación en Pune, una ciudad del oeste de la India. “Estoy decepcionada, porque no podemos grabar en Pakistán, un país que amo y que he visitado en tres ocasiones”, declaró la actriz.
Con el plan cambiado, Brad Pitt, Angelina Jolie y sus tres niños –Maddox (5), Zahara (21 meses) y Shiloh (6 meses)– se instalaron a comienzos de octubre en el hotel Le Meridien, en Pune, lugar que por estos días está sitiado por papparazzi de todas partes, a la caza de imágenes de una de las familias más famosas del globo. Nada a lo que Pitt & Co. estén desacostumbrados…
DOS DE CAL Y UNA DE ARENA. Sin embargo, después del incidente con Pakistán, las cosas no siguieron del todo bien para la pareja. Durante los primeros días de grabación, la actriz de Lara Croft sufrió una serie de desmayos que preocuparon bastante a Brad, quien decidió cancelar la filmación hasta que su chica se recuperara del todo. Como para relajarse, decidieron pasar un fin de semana en las playas de Goa, un pequeño estado frente al mar Arábigo, y luego viajaron a Lonavala, una localidad cercana, donde Jimmy Carter, su mujer Rosalynn y su fundación están llevando adelante la construcción de viviendas para la gente de la zona. Allí Brad, para delicia de la prensa, ofició de obrero.
Ahora bien, llegados a este punto, hay que decir algo: éste no es para nada el Brad de unos años atrás, el galán que cosechaba éxitos de taquilla, conquistas femeninas y tapas de revistas día tras día. No, Brad ha cambiado.
HOMBRE NUEVO. Desde que en octubre de 2004, durante la filmación de la película Mr. & Ms. Smith, conoció a Angelina Jolie, el galán es otra persona. Rompió su matrimonio de cuatro años y medio con Jennifer Aniston (con más de 109 millones de dólares de por medio), se fue a vivir con Angelina, cría como si fueran propios a Maddox y a Zahara (los dos hijos adoptivos de la actriz), tuvo a su primera hija biológica, Shiloh, y abrazó las mismas causas que su nueva mujer.
En enero de 2006, como buen marido (aunque todavía no lo es con papeles), acompañó a Angelina al Foro Económico Mundial de Davos en su cargo de Embajadora de Buena Voluntad del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (todo eso), luego declaró que recién se casarían cuando los homosexuales pudieran hacerlo y, ahora, desconocido, se lo vio trepado a unos andamios, prestando sus manos para la construcción de unas viviendas. Después, por supuesto, estaba todo previsto para un asadito, pero… pequeño detalle: Angelina es vegetariana. Y Brad, ya saben, ahora también…
Brad, con casco de obrero, anteojos de sol y guantes de albañil, cargando una viga de madera en Lonavala, India.
Angelina Jolie, Brad Pitt y su hijo Maddox, de paseo en una rickshaw (una moto taxi de tres ruedas) por las calles de Pune, una ciudad al oeste de la India.
Brad, con Zahara en brazos, y Angelina, con Maddox, en el aeropuerto de Pune, luego de un fin de semana de descanso en las playas de Goa.
