En cinco años ha pasado por telenovelas, series, películas, campañas publicitarias y obras benéficas y culturales. En Chile dicen de él que es el actor joven con más futuro en la profesión. Desde hace dos meses, a ese piropo se le suma el de ser el padre más sexy… Pero no sólo se ha convertido en el actor chileno más deseado por los productores del otro lado de la cordillera. Ahora, Benjamín Vicuña piensa instalarse en Buenos Aires, junto a Pampita y su hija Blanca, para grabar la serie Lola, un proyecto de Sebastián Ortega y Pablo Culell.
“Desde hace tres años que me están ofreciendo proyectos en Argentina. Con mi representante, Jorge Hernández, siempre estuvimos conversando y viendo cuál era el mejor momento para hacer algo. Al principio no queríamos que nadie asociara mi trabajo con mi relación con Caro. Son dos cosas distintas: yo soy actor y Caro es mi mujer, la madre de mi hija. Quizás ahora que ya formamos una familia las cosas pueden ser diferentes, y el proyecto de Lola me pareció muy interesante. De todas maneras, hoy tengo la cabeza puesta en la serie de Canal 13 de Chile, Huaiquimán y Tolosa. Además es bueno que Caro y yo tengamos proyectos en los dos países. Queremos que Blanca se críe entre la Argentina y Chile”.
Uno de sus rasgos es la autoexigencia. Ante cada nuevo proyecto, Benjamín enfrenta un examen. “Siento que con Richard Tolosa, el hiperkinético, noble y torpe detective de Huaiquimán y Tolosa, o con mi personaje en Fuga, la película que hice con Gastón Pauls, puedo demostrar que lo que realmente me apasiona es ser actor”. Y hay más: su agenda también incluye teatro. A fines de septiembre encabezará un ciclo de monólogos en el Centro Cultural Mori, la sala que tiene en sociedad con Gonzalo Valenzuela. También planea una nueva temporada de la obra Cocinando con Elvis. “Todos estos proyectos terminarán de cerrarse y organizarse una vez que comencemos a grabar Lola. Aún no se sabe por qué canal argentino va a salir, ni si se va a vender a Chile, pero ésa es la idea, por supuesto”.
La grabación del piloto de Lola lo trajo a Buenos Aires junto a Pampita y Blanca, un viaje que ya en plena grabación obligará a la familia a ir y venir desde Chile. “Me parece muy interesante trabajar en la Argentina. Acepté hacer Lola porque creo que con el guión y los actores involucrados podemos armar una buena historia”. De paso, un poco de ocio familiar. A dos meses y medio de ser padre, paseó con Pampita y su beba por San Telmo, Puerto Madero y Palermo. “Sí, queremos que nuestra guagua se críe tanto con las costumbres chilenas como con las argentinas. Mi amigo Gonzalo (Valenzuela) armó su vida en Buenos Aires y le está yendo muy bien. El me aconsejó que aceptara la propuesta de Underground, la productora de Sebastián Ortega. Y Carolina también me ayudó a tomar la decisión final. Además, me siento muy feliz de haber podido traer a mi hija al país de mi mujer. Nos trataron con mucha amabilidad y respeto. Ahora nuestra vida y el corazón están divididos. Carolina y yo tenemos mucha gente querida en los dos países. Por eso vamos a construir un hogar en Santiago y otro en Buenos Aires. Con Blanca, todos los días siento sensaciones y cosas nuevas. Dicen que son los síntomas de padre primerizo: me sorprendo y festejo cada gesto nuevo que hace. Y estoy en las nubes: durante toda mi vida quise tener una familia como la que estoy empezando a construir”.
Vicuña, considerado uno de los actores chilenos con más futuro, ahora trabajará en la Argentina. Ya grabó el piloto de Lola. En Chile, acaba de estrenar Huaiquimán y Tolosa, serie que tuvo el rating más alto en su horario.
