La tele lo conoció como un chico de pelo largo, algo desafiante, cuando la
década despuntaba y su televisión también. Por entonces, Fontova le abría camino
a la tele cachonda con su Sonia Bragetti en Peor es Nada. Y Rosario Lufrano
levantaba la pantalla de Telefe Noticias. La noche de los Martín Fierro, aquella
vez, catorce años atrás, los ponía a los tres a competir por una estatuilla.
Ganó Fontova. Fabián Vena, no sabemos si ya lo imaginaba, tendría su revancha.
En el 2003, compuso al villano más intenso de los últimos años: un psicópata
irreparable, una fina encarnación del mal. Su trabajo en Resistiré formó parte
de un trabajo en grupo que fue sorpresa: por el rating, por la repercusión, por
la fiebre de su público. Y entonces Vena, a los 33 años, se llevó al Martín
Fierro por su papel en la novela que se llevó el Martín Fierro de oro. Si
existen las historias circulares, la de Fabián Vena y su premio cerró sin
fisuras.
En el medio, una historia y un amor. La historia: la que él fue escribiendo en
la pantalla chica. Fue Fabián Conejo en La Banda del Golden Rocket, y Leonardo
en Verdad/consecuencia. El amor: Inés Estévez, 39 años, actriz, su pareja desde
hace cinco, el fin de su dedicatoria cuando le toca ganar un premio.
-Ganaste. ¿Lo esperabas?
-No, nunca espero los premios. La nominación ya había sido un premio para mí.
Ahora me siento un poco en deuda con los compañeros que conformamos la terna,
porque no debería existir competencia en nuestro trabajo. El hecho de llevarse o
no un premio reaviva la figura del ganador o el perdedor. Yo no lo veo así.
Siento que desde el momento de ser reconocidos ante tantos colegas, los tres
-Pablo Echarri, Juan Darthés y yo- fuimos ganadores.
-¿Qué queda de la experiencia Resistiré?
-La alegría enorme de haber trabajado con un equipo de alto rigor artístico y
excelentes personas. Lo disfruté mucho.
-Hiciste de un malo muy malo…
-Sí, pero salir a la calle y que te feliciten por la actuación, aún habiendo
hecho de malo, es doble reconocimiento.
-¿Dónde pusiste tu Martín Fierro?
-Lo quise hacer dormir con los dos de Inés pero no tuvo suerte. Cada uno lo dejó
en su biblioteca.
La cámara va y viene por las mesas y, fugaces, Fabián e Inés cruzan la pantalla,
la sonriente imagen de los dos, juntos, todo lo juntos que las sillas le
permiten estar. "Hace cinco años que estamos juntos y la pasión crece día a día.
Nos entendemos y nos conocemos mucho", dice Vena. Tanto que en Loca, la obra de
teatro que dirige Luis Agustoni, Vena es el abogado defensor de una mujer que
trata de que no la acusen de loca: la mujer es Inés. "También -explica Fabián-
estoy grabando junto a Pablo Rago El Once, una comedia de televisión que estamos
tratando de armar bajo las órdenes de los publicistas Agulla y Baccetti, en el
primer emprendimiento de ficción que realizan."
-No hay descanso.
-No, por ahora no. Ahora quiero disfrutar del momento que vivo, del premio, del
amor y del trabajo que tengo. En definitiva, el descanso se recicla.
Los dos con ellos mismos detrás, en el afiche de promoción de Loca, la obra de teatro que ambos protagonizan.
