Baja del auto y así nomás, a cara lavada, deslumbra. Difícil creer que sólo un minuto antes, esta mendocina de curvas infartantes haya estado profundamente dormida, aprovechando para descansar el viaje entre sesión y sesión de fotos.
De inmediato, un ejército de productores, peinadores, vestuaristas, fotógrafos y camarógrafos se pone en marcha alrededor de Grisel Pérez Ponce (18 años, 57,5 kilos bien repartidos en 1,74 metro de altura, y medidas de 87-62-95), la ganadora del
SuperM 20/02.
Tímida aún, saluda a todos y se pone a trabajar, algo que hace sin interrupciones desde que la televisión la catapultó como la nueva cara (y cuerpo) del mundo fashion. Del anonimato, casi sin escalas, hoy es la cara de
Staff Cerini, By Deep, Ona Saez y, en el momento de hacer esta nota, 7up Light.
-¿Imaginaste que ibas a ser parte de esta campaña?
-No... para nada. Cuando hicimos el casting quedaron otras chicas también, y eso me bajoneó un montón. Al ser nueva, no sé bien cómo presentarme en las audiciones, por ahí pierdo esperanzas...
-Mal no te va, Grisel. Tenés muchísimo trabajo.
-Sí, estoy viviendo un sueño. A veces me parece mentira estar en este ambiente, aunque el mundo del modelaje no es lo que me imaginaba. Recuerdo que de chiquita trabajé como changarín en un supermercado y muy poca gente me prestaba atención o me daba una moneda de propina. Mirá ahora.... hay casi veinte personas trabajando para que salga lo mejor posible en las fotos.
Y pensar que en Mendoza cobraba 30 pesos por desfile...".">
Grisel pasó de trabajar como changarín en un supermercado mendocino a compartir las pasarelas con las más cotizadas modelos argentinas. "Y pensar que en Mendoza cobraba 30 pesos por desfile...".
En muy poco tiempo, la ganadora del SuperM 20/02 participó de las campañas de By Deep, Staff Cerini, Ona Saez y 7up Light. Diosa por donde se la mire, dice que valora el dinero que comenzó a ganar, y que en el futuro va a traer de Mendoza a toda su familia para no extrañarlos.
