Con regulaciones que cambian todas las semanas, ¿alguien sabe para qué se necesita permiso y para qué no?
"Me sacaron el registro en CABA por hacer 10 cuadras en auto de vuelta de un restaurant :( Me explicó la agente que no hay que tramitar pasaporte COVID por uno mismo (no hay cateogoría "salidas") sino que el restaurant me lo tendría que haber mandado junto a la reserva", tuiteó el economista Lucas Llach en el inicio de un hilo en el que contó su desafortunada experiencia, generada en el fondo por una proliferación de regulaciones que para la mayoría de los ciudadanos es muy difícil de cumplir...
Según contó Llach, la agente le explicó que "ir a comer afuera no es un derecho, es un privilegio". Para retirarle el registro, se montó un operativo que demandó dos agentes (según supo GENTE, se trataba de agentes del área de Seguridad del GCBA y no de Tránsito), cinco oficiales de policía y tres vehículos.
Pero ¿es necesario pedir permiso para salir a cenar? Pasados más de seis meses desde el inicio de una cuarentena que según el presidente Alberto Fernández no existe, y en momentos en que la situación económica ya torna de por sí difícil la decisión de gastar unos pesos de más y salir a un restaurante, lo más lógico sería que no fuese necesario ningún trámite. Algunos constitucionalistas consideran, además, que es inconstitucional la extensión en el tiempo de las limitaciones para circular establecidas por decreto en vez de por ley, por más justificación sanitaria que tengan.
Esta discusión es la que parecen haber tenido los oficiales que intervinieron en el operativo, según el relato que hizo el ex funcionario del Banco Central y el Banco Nación durante la gestión macrista: "Para no poner a todos en la misma bolsa: el policía de mayor jerarquía me llevó a un aparte y me dijo 'yo no estoy de acuerdo con lo que está haciendo ella, pero no puedo desautorizarla'. Había habido un debate interno entre ellos sobre cómo proceder".
El relato de la situación, que ocurrió en un control ubicado en la calle Honduras, en Palermo, desató la reacción inmediata de varios usuarios de la red social. La usuaria @marina_alr, por ejemplo, relató que vivió una situación similar poco tiempo atrás, cuando fue al supermercado:
Lo más insólito de la situación es que el objetivo de las disposiciones es desalentar la circulación para reducir los riesgos de contagio, pero al obligar a los infraccionados a presentarse ante los controladores de faltas, en rigor aumentan las posibilidades de contagio.
