Desde que la empresaria Wanda Nara volvió a nuestro país a cumplir sus contratos laborales, los medios no cesaron con preguntas acerca de la relación con el cantante de cumbia L-Gante. El artista fue como invitado al programa Red Flag y en el medio de la transmisión, lo comunicaron vía telefónica con Wanda.
Mientras los conductores les preguntaban por las anécdotas que tuvieron, Tuli Acosta les consultó si alguno de ellos tenía problemas de impuntualidad. En ese momento, Wanda comenzó a contar una anécdota con Elián. "Me dijo que me iba a buscar al aeropuerto, no me habló por dos días y cuando apareció le envié un mensaje insultándolo, pero después me mandó una foto que estaba esperándome", relató la empresaria.
Además, el cantante recordó otra salida, donde se le hizo tarde y querían cenar, pero ya estaban todos los restaurantes cerrados ya que eran las 2 de la mañana. Aunque rápidamente resolvió la situación, llevando a la empresaria a comer un choripán a la costanera. "Yo creo que estaban tan sorprendidos porque estábamos ahí, que ni fotos nos pidieron. El vendedor ni nos miró" aseguró Wanda, entre risas.
Luego, Wanda pidió permiso para contar otro hecho que vivió junto a L-Gante. "Queríamos ir a bailar a un boliche, pero yo tenía miedo porque hoy en día son todos periodistas con el celular, entonces él me dijo que me quede tranquila que me iba a llevar a un lugar donde nadie me iba a sacar fotos", comenzó relatando la modelo.
Y continuó la historia: ”Cuando llegamos era un lugar lleno de amigos de él. Entonces veo que una chica me estaba grabando y le dijo, y me contestó que no me preocupara, que era su vecina". Sin parar de reírse por la anécdota, el cantante aseguró que fue una de las noches que más disfrutó junto a Wanda.
