Después del calvario que vivió en las últimas semanas debido al accidente que sufrió cuando cayó desde una aerosilla a siete metros de altura cuando estaba esquiando en Aspen, Vero Lozano transitó una asombrosa recuperación en la que paulatinamente pudo ir retomando sus actividades.
La conductora de “Corta por lozano” se operó de los dos tobillos y se supone que por al menos tres meses más estará imposibilitada de caminar, algo que no la inhabilita para poder comenzar a cumplir con sus compromisos laborales. Es así que primero Telefe montó un estudio en su casa y, en las últimas horas, regresó a la sede del canal en Martínez para hacer su programa.
Fue en el marco de esta vuelta formal en la que dio algunos detalles de cómo pasó estas primeras semanas y contó la forma en la que tuvo que adaptar algunos sectores de su casa para poder movilizarse con la silla de ruedas. “Va a ser como aprender a caminar otra vez”, sintetizó en diálogo con su equipo.
“El mundo de la discapacidad es un mundo nuevo que estoy descubriendo y que abrazo a todos y a todas también. Es sorprendente también como los demás se autolimitan en el cuidado”, agregó.
Bañarse o salir de su casa es armarse de paciencia y tener que ir pasando de silla en silla para poder concretar el hecho. “Empezás a valorar cosas que antes las hacías automatizadas, que antes, egoístamente, no pensaba. Como no entraba en mi universo, no lo tenía en cuenta”, dijo.
El encargado de todos los detalles en el hogar es el Corcho Rodríguez que la ayuda permanentemente: “Armó el baño para yo que pudiera pasar. Cuando llegué llegué y ya había tirado puertas abajo”, dijo sobre uno de los cambios sustanciales que sufrió en la propiedad. Las modificaciones comenzaron cuando aún estaban en Estados Unidos con el objetivo de tener los espacios acondicionados para que la conductora esté cómoda a lo largo del proceso de recuperación.
