Luego de la feroz golpiza que los rugbiers acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa propiciaron contra Máximo Thomsen que se produjo la semana pasada, este martes volvieron a ser noticia tras arremeter nuevamente contra su “amigo”. La situación pone en alerta a las autoridades penitenciarias que podrían tomar drásticas medidas.
El motivo de la pelea habría sido que los compañeros de Thomsen lo acusan del fracaso de la estrategia judicial llevada a cabo por Hugo Tomei, el abogado que los defendió y que fue contratado por su familia.
La división del grupo luego de la condena es más que evidente. Hace unos días, Blas Cinalli explicó que la fragmentación se produjo en dos: por un lado se encuentran Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi y por el otro están Matías Benicelli, Thomsen, Comelli y los hermanos Luciano y Ciro Pertossi.
“Ayrton, Lucas y yo estamos un poco distanciados de los otros chicos. No te voy a decir que súper peleados, pero sí distanciados de palabra”, le dijo el asesino al periodista Cristian Echeverría.
Por su parte, una fuente informó al sitio Big Bang News: “Están re calientes y encima no tienen plata. Ellos tienen sólo tres horas autorizadas para salir al patio, porque no los cruzan con los otros presos. Están ellos solos. Hubo una pelea. Se empezaron a putear y se fueron a las manos. La ligó Thomsen y uno le gritó que los hundió a todos. La pelea aceleró el traslado de Benicelli”.
Blas Cinalli quiere cambiar de abogado y su familia ya se reunió con Miguel Ángel Pierri
"A mi estudio se acercaron en consulta tres allegados de quienes que están condenados en el caso Fernando, me hicieron conocer la inquietud, yo les hice conocer las condiciones profesionales y económicas, luego tuvimos un segundo contacto el martes", dijo Pierri en diálogo con el programa Más Allá de las Noticias.
En ese sentido, Pierri aseguró que "nadie discute que son los asesinos de Fernando", y sí aclaró que la intención como profesional es que "la Cámara de Casación Penal Bonaerense le reduzca los años de prisión a tres de los ocho condenados por la participación que tuvieron en el crimen". Sin embargo, dejó en claro que, momentáneamente, solamente la familia de Cinalli estaría dispuesta a contratar su servicio.
Luego, destacó que el "caso de Cinalli y Viollaz, me parece que tiene que ser planteado de otra manera porque por ser primarios le dieron la máxima del delito de partícipe secundario, pero estoy convencido que les va a bajar la pena”. Además, en diálogo con Radio Colonia agregó que antes de este lunes “se definirá si asume o no” la defensa de Blas Cinalli.
El propio Blas Cinallii mantuvo contacto la semana pasada con el canal Crónica desde la Alcaldía de Melchor Romero, y allí expresó que "no estaba conforme" con el abogado que representa actualmente a los ocho acusados, Hugo Tomei. También dijo que tenía la intención de cambiar de defensor, pero que no lo hacía por un tema de dinero.
Pierri, por su parte, dijo que en el transcurso de este fin de semana se resolvería si llegan a un acuerdo, con uno de ellos. “Estamos un poco lejos todavía. Mi equipo estuvo teniendo contacto con un allegado que vive en Escobar de la familia Cinalli". "En el caso de (Blas) Cinalli y (Ayrton) Viollaz, me parece que tiene que ser planteado de otra manera porque por ser primarios le dieron la máxima del delito de partícipe secundario, pero estoy convencido que la Casación Penal les va a bajar la pena", aseguró.
Las condenas a los rugbiers
Ayrton Viollaz, Lucas Pertossi y Blas Cinalli fueron considerados partícipes necesarios y fueron condenados a 15 años de prisión, mientras que Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Benicelli, Luciano Pertossi fueron condenados a prisión perpetua por el delito de "homicidio doblemente agravado por homicidio premeditación y alevosía en concurso real".
