Nico Riera (35), más conocido como Tacho Riera, estuvo al borde de que Instagram le diera de baja una foto por violar normas de la comunidad. Es que la red social de Mark Zuckerberg no perdona desnudos pero al parecer los de hombres no generan inconvenientes. Al menos eso sucedió con el desnudo total que el actor subió a su feed: se trata de una fotografía tomada por su novia, la actriz Giulia Gabetta. La imagen, en la que se lo registró de espaldas mientras se bañaba y tomando el shampoo, no solo generó cientos de comentarios halagando su porte, también despertó la inesperada reacción de su ex, la bailarina Silvina Escudero (37).
"Hasta que Instagram me censure, comparto esta foto sacada por @giuligabetta__", escribió el ex Casi ángeles como pie de foto de la siguiente postal.
En minutos, la publicación obtuvo miles de likes y comentarios. Al momento, suman casi cien mil Me Gusta y más de dos mil mensajes que elogian su escultural cuerpo y más precisamente "su irse".
"Señor... ¿Necesita una toalla?, "Qué ganas de ser esta ducha", "Ahora entiendo por qué lo de Tacho", fueron algunos de los mensajes de sus seguidores, quienes no ahorraron emojis de fuego.
Pero la nota la dio Escudero. Ángel de Brito había publicado la comentada imagen con la leyenda "Tacho contra la censura en IG". Para sorpresa de todos, la bailarina likeó ese tuit aprobando el sensual desafío de Tacho o quien sabe, si lo que recordó al ver la imagen. Rápido, el periodista y conductor de Cantando 2020 (eltrece) capturó el fav de la bailarina y lo republicó en su perfil.
Recordemos que en 2011, mientras Tacho y Silvina estaban juntos protagonizaron un escándalo en las redes con una imagen íntima de ella, tomada por él, que se terminó filtrando. Se trataba de una foto en la que aparecía desnuda en el baño y que generó controversia. En ese momento, la bailarina explicó cuánto sufrió que violaran su intimidad: "Me afectó un montón". Tiempo después Escudero, quien había necesitado ayuda psicológica para atravesar esa situación traumática, explicaba: "La sacaron de una computadora que la mandamos a arreglar. Fue horrible. Y no pude hacer nada. Pagué un montón de abogados, en dólares, gasté una fortuna y no pude lograr nada. Me sentí muy triste, muy deprimida".
