Así fue la coronación de la reina Isabel II en 1953: las fotos del fastuoso evento y sus imágenes más curiosas – GENTE Online
 

Así fue la coronación de la reina Isabel II en 1953: las fotos del fastuoso evento y sus imágenes más curiosas

Las fotos inéditas de Lilibeth, cuyo reinado abarcó siete décadas y fue el último jefe de Estado que sirvió durante la Segunda Guerra Mundial.

Isabel II (1926-2022; su nombre real es Elizabeth Alexandra Mary Windsor) sobrevivió a crisis y polémicas familiares ­–desde infidelidades a acusaciones de racismo– y fue protagonista de los cambios políticos y sociales que marcaron el siglo XX. Su muerte "pacífica", ocurrida el 8 de septiembre de 2022 en Balmoral (Escocia), conmovió al mundo y marcó el fin de una era.

Tras la coronación de Carlos III, que ascendió al trono el sábado 6 de mayo, recopilamos las mejores fotos de la mujer que fue coronada el 2 de junio de 1953 y que reinó siete décadas y abordamos, también, su relación con personalidades argentinas (de Carlos Saúl Menem a Adolfo Cambiaso) y el impacto de su legado estético.

Las fotos de la coronación de Isabel II

Isabel II fue coronada el 2 de junio de 1953 en la Abadía de Westminster. A sus once años, en 1937, había asistido a la entronación de su padre, el rey Jorge VI.
Un vestido de oro y plata que lució la reina Isabel II durante su coronación.
La reina Isabel y su retrato oficial en su coronación. Así posó con el cetro con la cruz y el orbe, una esfera de oro con gemas, que simboliza "su rol de defensora de la fe".
Lilibeth con el diseño que le encargara a Norman Hartnell, el diseñador británico responsable de su vestido de boda con Felipe en 1947. El outfit le gustó tanto que lo usó seis veces en total.
Una reliquia del archivo del Grupo Atlántida: el souvenir de la Coronación de Isabel II.

Lilibeth, nacida para reinar

Elizabeth Alexandra Mary Windsor nació el 21 de abril de 1926, en Londres, Inglaterra. En la imagen, en brazos de su madre, Isabel Bowes-Lyon.
De pequeña, junto a sus adorados perros corgi ­–raza nativa británica por la que tuvo predilección­–.
1965. Carismática y sofisticada, la reina Isabell II a doce años de mandato.
Un retrato de su incipiente romance con Felipe de Edimburgo (casados desde 1952 hasta la muerte del rey consorte, en 2021).
Lilibeth en 1954, un año después de su coronación.
 13 de Junio de 1981: “Un susto real y balas de fogueo”. Así titulaba GENTE el atentado sufrido por la reina durante los festejos por su cumpleaños. Durante la ceremonia, Marcus Sarjean, un desocupado de 17 años, le disparó a la soberana ­–que desfilaba en su caballo– en seis ocasiones. Afortunadamente, Isabel salió indemne.

Las fotos más curiosas de la Reina Isabel II

Aprendió natación a los 10 años en el London Bath Club e incluso ganó varios torneos. Otras pasiones deportivas en el futuro serían el tenis (presenció cuatro Wimbledon) y las carreras de caballos (su devoción hizo que tuviera asistencia perfecta en el tradicional evento hípico Royal Ascot).
Isabel persuadió a su padre para que le permitiera unirse al cuerpo femenino del ejército, donde se formó como conductora y mecánica. Muy rápido alcanzó el rango de comandante junior honorario.
En su rol como mecánica de coches durante la Segunda Guerra Mundial
Su Majestad, “exploradora”, junto a su hija Ana.
Enero de 1960: embarazada de Andrés.
De las pocas fotografías en las que la monarca luce pantalones.
Lilibet, con casco y mono blanco, en la inauguración de una mina escocesa, retratada en los 50’s por Harry Benson, a quien tiempo después le pediría un retrato oficial.
Cuando grabó un sketch con el oso Paddington –personaje que aman sus bisnietos­– al ritmo de We will rock you para abrir las celebraciones por su Jubileo de Platino, en junio de 2022, año que marcó los 70 años desde su ascenso al trono.

La relación de Isabel II con personalidades argentinas

La reina Isabel II nunca visitó Argentina, pero recibió en el Reino Unido a los expresidentes Arturo Frondizi y Carlos Saúl Menem cuando ejercieron sus cargos. Con el primer mandatario (Unión Cívica Radical Intransigente) se reunió en 1960, dos años antes de que fuera derrocado. En 1962 fue el Rey Felipe, su esposo, quien viajó al país para respaldarlo.
“La reina nos confesó que la conquistamos”, le decía Carlos Saúl Menem a GENTE en octubre de 1998, cuando la monarca británica recibió en el Palacio de Buckingham al por entonces presidente argentino. La visita se dio cuando aún faltaban diez meses para que el Reino Unido autorizara los vuelos de ciudadanos argentinos a las Islas Malvinas. “La reconciliación a dieciséis años de la guerra”, informaba el copete de la nota de tapa, haciéndose eco del que fue un punto de inflexión en las relaciones diplomáticas entre nuestro país e Inglaterra.
Algunos de los numerosos encuentros de la royal con polistas argentinos, que entregaba la Queen’s Cup. Facundo Pieres, que ganó el torneo cinco veces, dio la nota en 2014 cuando, luego de una final victoriosa y en plena entrega de premios, apoyó la mano en el hombro de la monarca, rompiendo el protocolo.
Adolfo Cambiaso, el polista que más trató a la reina (ganó diez veces la Copa de la Reina), dijo sobre ella: “Siempre me pareció una persona muy a tierra, muy normal. Era fanática de los caballos. Te preguntaba los pedigrees, dónde jugaban, si las yeguas eran argentinas, inglesas o neozelandesas”.
En junio de 2018, a los 12 años, Poroto Cambiaso (que ese año ganó el torneo junto a su padre) recibió el galardón de manos de Isabel II.
El campeón Nico Pieres, en 2019, también rompió el protocolo real. Esa fue la última entrega de premios de la royal.
La soberana y el Papa Francisco, con quien se reunió en el Vaticano el 3 de abril de 2014.

El legado estético de la reina Isabel II

Los trajes sastre monocromáticos siempre fueron una apuesta distintiva, con la que se supo diferenciarse de otros royals: con su elección, se aseguraba la atención. En colores vivos y optimistas, siempre lució el mismo tono de la cabeza a los pies. Aunque su color favorito era el amarillo.

Su obsesión por vestir engamada ­–muchos de sus outfits fueron creados por Sir Hardy Amies, célebre diseñador británico fallecido en 2003­– fue disparador de libros como Tribute to Queen Elizabeth II and Her Colourful Wardrobe (Tributo a Isabel II y su colorido armario), de Sali Hughes. ¿La responsable del vestidor de la reina? Ángela Kelly, que encabezaba un equipo integrado por catorce personas­.

“Me ha permitido ser una persona cercana a ella, aunque nunca me paso de la raya. Solíamos hablar de ropa, maquillaje y joyas como dos mujeres normales”, ha contado la estilista a cargo de sus looks. Mientras la monarquía por lo general recurrió a los símbolos para asentar su poder, Isabel II fue una de las primeras en hacerlo a través de los masivos medios de comunicación.

Coleccionista de carteras de asa corta (en las que según sus biógrafos llevaba un labial, un estuche de gafas, un gancho para colgar la cartera, pastillas de menta, una pluma, un billete de cinco libras para donar en caso de asistir a algún evento religioso, fotos familiares, pañuelos de papel y un amuleto de la suerte nunca revelado) y fan de los tacones bajos, a lo largo de su vida pública la monarca lució más de 5000 sombreros diferentes.

Fotos: archivo Grupo Atlántida y Fotonoticias.

Recopilación de material de archivo: Mónica Banyik.

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