Mientras su madre, Soledad Aquino (59) se recupera en el sanatorio La Trinidad, y su novio, Coti Sorokin (48) está de gira en España, Cande Tinelli (30) fue blanco de críticas por una serie de reclamos referidos a canjes de Instagram con los que supuestamente no había cumplido.
A raíz de filtraciones de mensajes directos de emprendedoras a los que la hermana de Mica Tinelli no respondía –aún habiendo recibido la mercadería, en su mayoría artículos de indumentaria–, Lelé se vio en la obligación de aclarar cómo se maneja con las colaboraciones e hizo un descargo al respecto.
Luego del escándalo en el que diseñadoras y dueñas de PyMes compartieran capturas de mensajes directos en los que confirmaban que la hija de Marcelo Tinelli había recibido canjes pero no los había recompensado con una publicación, Cande tomó sus Instagram stories para explicar lo sucedido y establecer nuevas pautas.
Lelé compartió un mensaje de un seguidor que le había escrito: "Entonces es fácil: no aceptás el canje y listo. Se entiende que no puedas dedicar tiempo a hacer el chivo. Entonces no aceptes la mercadería para no ilusionar al vendedor".
Y enseguida compartió su descargo. "Totalmente de acuerdo. Es así. A partir de ahora no hago más canjes, espero que entiendan los que me piden que los ayude... aunque realmente me den ganas porque deseo que a la gente le vaya bien", comenzó explicando.
Y aclaró: "No es un momento para aceptar este tipo de cosas. Para mí esta es una gran fuente de trabajo. Así que seguiré tomándomelo así".
No contenta con la explicación catártica, Lelé reaccionó despectivamente hacia muchos de los productos que le habían enviado.
"Y a la persona que dice haber invertido en mí, que no mienta. Y que pase por mi casa que le devuelvo la taza, la pantufla y el pijama del tamaño de Lolo que me mandó", disparó. Y siguió: "Si no le devuelvo el dinero, no tengo problema". Fiel a su estilo, finalizó: "Gracias a todos, me hinché las pelo...".
