Eugenia Laprovíttola, de 25 años y jugadora de fútbol de Independiente, se enteró que podría ser hija de Diego Maradona y, tras su muerte, inició un juicio de filiación para corroborar si el jugador es efectivamente su padre.
Eugenia fue dada en adopción cuando tenía pocos días de vida. Aunque supo que quienes la criaron no eran sus padres biológicos, nunca buscó a sus progenitores. Sin embargo, cuando Diego Maradona murió, llegó a sus oídos que podía ser la hija del Diez.
“¿Qué le diría a Diego? Que lo extraño muchísimo. Que a veces lo extraño tanto, que a la noche me pongo a mirar sus videos para no olvidarme su voz. Que me hubiera encantado compartir más tiempo. Que me enoja, me molesta mucho la forma en la que se fue de este mundo. Que me hubiera gustado cuidarlo”, dijo Laprovíttola en una entrevista.
“Siento que me hace falta. Que hace falta su energía, su risa. Que para mí, ir a la cancha no va a ser lo mismo ya, porque él no va a estar. Y yo iba a la cancha a ver a Diego. A veces me gustaría que baje un ratito, porque creo que nos debemos una charla. Quizás, la más importante de mi vida”, agregó.
Para terminar, Eugenia Laprovíttola, con lágrimas en los ojos, dejó un emotivo mensaje para Diego. “Que no se preocupe que yo desde acá lo voy a defender toda mi vida. Nunca lo voy a dejar de querer. Y nunca lo voy a olvidar. Nunca”, concluyó.