Allison Mack (38), conocida por su papel de Chloé Sullivan en la serie Smallville, fue condenada el miércoles a tres años de prisión por su rol en la organización de NXIVM, la secta creada por Keith Raniere.
En el culto sexual se marcaba a las mujeres con las iniciales de su líder y se las obligaba a mantener relaciones sexuales con él. Se espera que la actriz nacida en Alemania comience a cumplir su condena el 29 de septiembre. Ya en 2019 se había declarado culpable de asociación delictiva y conspiración. Finalmente, ahora fue sentenciada por el juez Nicholas Garaufis en Brooklyn.
Antes de escuchar la sentencia, Mack se disculpó con las víctimas y familiares de la secta sexual en la que se encargaba de reclutar "esclavas" sexuales. "Salir de ese engaño ha sido la experiencia más difícil de mi vida", dijo ante el juez. Y reconoció: "Tomé decisiones de las que me arrepentiré toda la vida".
“Le pido disculpas a todos los que recluté para NXIVM, siento haberlos expuesto a los planes perversos y abusivos de un hombre retorcido”, que insistió con el pedido de perdón. “Desde la parte más profunda de mi alma y corazón, lo siento mucho”, concluyó.
Mack redujo exponencialmente su sentencia al haber contribuido con los fiscales para descubrir la verdad sobre los crímenes cometidos por Raniere, que incluían abuso de menores, estafas, amenazas y secuestros, por los que fue condenado el líder del culto a 120 años de cárcel. Por su rol como reclutadora y facilitadora, Mack podría haber tenido que pasar en prisión hasta 14 años.
Cómo operaba la secta sexual que se presentaba como de "autoayuda" y por la que Allison Mac fue condenada a tres años de prisión
NXIVM, la secta creada por Raniere en 1998, nació como “programa de desarrollo personal y profesional” que se presentaba simplemente como una organización de autoayuda, cuya sede funcionaba en Albany, en los suburbios neoyorkinos.
Junto a su socia comercial, una ex enfermera de nombre Nancy Salzman, el programador informático fundó el grupo que ofrecía seminarios y capacitación para personas "preocupadas por desarrollar sus habilitades". En 2018, el programa llegaba a 30 países, alcanzando las 16 mil personas. Según informó Rolling Stone, un workshop costaba 7500 dólares diarios.
Raniere funcionaba como una suerte de "gurú", a quienes muchos de sus ex miembros describieron como "un charlatán que explotaba a sus seguidores".
Lo cierto es que Raniere, a quien llamaban "gran amo", reclutó a ocho mujeres para que se unieran a DOS, una sociedad secreta conectada con NXIVM. En un esquema de estilo piramidal, parecido al del caso de Jeffrey Epstein, ellas debían reclutar esclavas adicionales, que a la vez continuaban la cadena sumando a nuevas presas sexuales.
Para unirse, las mujeres entregaban como garantía fotografías sexuales explícitas o algún contenido delicado que aseguraba su debida obediencia al líder del culto. Según contaron las víctimas durante el juicio a Raniere, las mujeres eran advertidas de que podrían dar a conocer esas pruebas si llegaban a revelar la existencia del grupo.
El rol de reclutadora Allison Mack en la secta sexual
El papel de la actriz de Smallville en la estructura de la secta creció gracias al cómplice vínculo con su líder. De hecho ella fue la responsable de reclutar "esclavas" para un grupo de mujeres que por el resto de sus vidas debían dedicarse en cuerpo y alma a Raniere.
Además, eran sometidas a dietas de hambre, eran marcadas con las iniciales de su "amo" y en algunos casos se las obligaba a tener relaciones sexuales con él.
Mack era tanto "esclava" como mentora de otras mujeres. En su declaración de culpabilidad admitió que obligó a dos mujeres a realizar un trabajo no remunerado amenazando con revelar información que las perjudicaría.
Una de las víctimas, Jessica Joan, contó que Mack la manipuló emocionalmente y le ordenó que "sedujera" a Raniere. Según le prometió, al hacerlo resolvería su trauma con un abuso sexual previo. Según manifestó Joan, no acató la orden.
Fotos: Fotonoticias.
