La historia de Rodrigo de Paul, no está marcada solamente por potreros y gambetas, El jugador también implica valores inmensos, como la unión, la familia y la lealtad, así como la que tuvo con su abuelo, Osvaldo, el ejemplo de su vida, quien hoy lo sigue a todos lados a sol y sombra impregnado en su piel y en su alma, pero... ¿Por qué para el volante de la Selección Argentina fue tan importante su abuelo?
Su abuelo, Osvaldo De Paul, fue quien acompañó a Rodrigo en cada paso que dio el volante de chiquito, fue su abuelo quien estuvo y lo siguió en su recorrido por las inferiores, el familiar que más confiaba en que su sueño empezaría en Racing con tan solo 8 años, un De Paul lleno de esperanzas, las cuales las supo plasmar en aquellas canchitas de Sarandí.
Roberto De Paul es el padre de Rodrigo, pero por muchos años fue quien no estuvo para él, debido al divorcio que marcó un antes y un después en la familia. Por eso, el papel principal de papá lo ocupó Osvaldo de Paul, el abuelo que estuvo para darle el empujoncito que necesitaba a Rodrigo para brillar y salir al ruedo.
En cada entrenamiento, Osvaldo estaba ahí, mirando a un pequeño Rodrigo, sin imaginar nunca aquel pase milimétrico que dio 15 años más tarde su nieto en el Maracaná para la consagración de Argentina en la Copa América.. Ese abuelo paterno que se hizo cargo porque sus padres se la pasaban trabajando y hoy ocupa un espacio en la piel de Rodrigo, pero una huella sumamente gigante, que nadie podrá borrar jamás.
“Mi ejemplo a seguir es mi abuelo, cuando yo era chico falleció pero él era el que me acompañaba a los entrenamientos, yo vivía con él, prácticamente. Estábamos todo el tiempo juntos, yo lo admiraba mucho, él siempre tenía mucha fuerza para hacer todo, era como que todo lo que ocurría alrededor mío y de mi familia siempre tenía una respuesta, él fue el que me acompañó y me guió en todo este proceso que hice hasta ser jugador. Luego en la vida no pudo acompañarme, pero me dejó el legado de que hay que afrontar los problemas y la vida siempre con una sonrisa y energía positiva, y que todo te deja una enseñanza”, comentó De Paul en una pequeña charla acerca de su abuelo, Osvaldo.
“Estaría muy orgulloso, a él le gustaba mucho el fútbol y siempre estuvo conmigo. Era un crack. Mi abuela Alicia también. Ella guarda todos los recortes en los que salgo”, dijo Rodrigo de Paul hace 9 años atrás acerca de su abuelo en la revista El Gráfico, cuando apenas era un juvenil y pensaba todo el tiempo en como estará Osvaldo desde arriba.
