Gwyneth Paltrow (48), en diálogo con radio Sirius XM, afirmó que parte del glamour de su trabajo desapareció debido a la exposición pública a la que se ve sometida continuamente.
La actriz dijo literalmente que se desenamoró de la actuación y agregó que luego de ganar el Oscar en 1999 por Shakespeare in love sintió como que perdió la orientación. Además, indicó que no ayudó haber tenido que trabajar con una persona como Harvey Weinstein, el ex magnate de Hollywood que fue condenado a 23 años de prisión por abuso sexual, denunciado por cientos de mujeres, varias de ellas actrices.
“Comencé a sentir que parte del brillo de la actuación se desvaneció. Sentí que no valía la pena hacer esto. Estar en tan intenso escrutinio público y ser una mujer que vive cada ruptura en los titulares”, contó Gwyneth Paltrow.
En referencia a Weinstein dijo: "Si combinas esas cosas con el hecho de que para ser totalmente sincera, tuve un jefe muy cruel durante la mayor parte de mi carrera cinematográfica en Miramax”.
La actriz también acuso a Harvey en 2017 por hechos que se remontan a cuando ella estaba danto sus primero pasos en la actuación.
El último papel de la estrella de Hollywood fue en 2015, en Mortdecai. Desde entonces ha interpretado a Pepper Potts, la secretaria de Iron Man en: Iron Man, Avenger Infinity War y Endgame, y Spider-Man: Homecoming.
A pesar de sus apariciones en el universo Marvel, Paltrow se alejó del cine y se dedicó a su empresa Goop, una exitosa compañía que vende productos de belleza y está valorada en 250 millones de dólares.
También habló del nacimiento de Goop, que se formó al principio como un boletín con consejos sobre bienestar y ahora es una compañía millonaria, que vende libros, productos cosméticos, accesorios de moda, incluso su exclusiva vela con aroma a su vagina que fueron una revolución cuando salieron a la venta.
