Durante la noche de los festejos por Año Nuevo, Yoselín Ailén Rodríguez (11) fue abusada sexualmente y asesinada de 10 puñaladas, en la localidad de Media Agua, San Juan. El principal sospechoso para la justicia era su propio primo de 24 años, Juan Carlos Rodríguez.
En la mañana de este martes fuentes policiales y judiciales confirmaron que Juan Rodríguez confesó haber asesinado a su prima y brindó los detalles de donde se encontraba el arma homicida.
El cuchillo con el que le dio muerte a la niña de 9 puñaladas en su cuello y una en su rostro, luego de haberla violado, habría sido enterrado por el asesino para sacarlo de la escena del crimen.
Hasta el momento la declaración dada por Juan Carlos Rodríguez sería valida para el Ministerio Público Fiscal, aunque la investigación continúa para entender si existió en el acto una "presunta venganza" contra el padre de Yoselín, con quien el joven tendría una mala relación.
Fuentes explicaron al Diario de Cuyo que tras el hallazgo del cuerpo de la menor Rodríguez estuvo entre toda la multitud y, cuando los pesquisas comenzaron con las entrevistas, se refugió en la casa de su madre, tía de la víctima. Esa mujer no fue colaborativa con la investigación y en todo momento trataba de resguardarlo.
Actualmente el hombre se encuentra en la Central de Policía y se espera que hoy sea trasladado al Penal de Chimbas, en la provincia de San Juan, ya que el fiscal coordinador de la UFI Delitos Especiales, Iván Grassi, adelantó que pedirá la prisión preventiva.
Rodríguez se encuentra imputado por delito de homicidio agravado por alevosía, criminis causa y violencia de género y le correspondería prisión perpetua.
La reconstrucción del caso por la justicia hasta ahora
Yoselín Rodríguez comenzó los festejos del nuevo año en el asentamiento ubicado en calle Quiroga, a unos 300 metros de la Ruta Nacional 40, con su madre. Luego del brindis la niña se trasladó a la casa de su abuela paterna, a pocos metros, donde también vive su padre y otros familiares cercanos entre los que se encontraba, Juan Carlos Rodríguez.
Según los investigadores en algún momento de la velada el principal sospechoso sacó a la pequeña que se encontraba durmiendo dentro de la vivienda, la violó y luego la mató de 10 puntazos, nueve en el cuello y uno en el rostro. El cuerpo fue arrastrado algunos metros de la escena y la abandonó desangrada.
Sus familiares desesperados al no encontrar a Yoselín comenzaron a buscarla en los alrededores y fue su padre quien la habría encontrado sin signos vitales, con la ropa dañada y un charco de sangre alrededor.
