Una de las áreas relevantes dentro de la industria del automóvil está relacionada con los materiales compuestos, aquellos que se forman de la unión de dos o más materiales para conseguir propiedades que no es posible obtener de ellos por separado. En el segmento de los súper deportivos, la fibra de carbono es uno de los más relevantes ya que permiten crear piezas tan resistentes como el acero, pero de un peso extremadamente bajo.
McLaren Automotive, empresa que nació como un apéndice del equipo McLaren de Fórmula 1, es una de las tantas compañías que utiliza composites para la creación de sus modelos. En su caso el área tiene como responsable a Ella Podmore, científica e ingeniera de 24 años.
Ella está involucrada en todas las investigaciones de materiales, desde los primeros dibujos hasta el producto final. Se unió a McLaren Automotive en 2016 después de haber completado una licenciatura en ingeniería de materiales en la Universidad de Manchester.
Desde entonces, ha progresado rápidamente, creando su departamento desde cero y equilibrando su tiempo entre experimentos y reuniones técnicas. Su trabajo fue reconocido en 2021 al recibir el premio Joven Ingeniera del Año otorgado por la Institución de Ingeniería y Tecnología (IET).
“McLaren fue una empresa que siempre respeté cuando era niña, pero en ese momento no empleaba ingenieros que se dedicaran a los materiales compuestos. Mientras estudiaba les escribí una carta detallando mi conocimiento de los materiales y mi pasión por los superdeportivos. Me invitaron a una entrevista y el resto es historia...”, explica Elle.
La joven ingeniera pasó 12 meses resolviendo problemas relacionados con los materiales. Toda esa experiencia la volcó en sus tesis. “Después de completar mi maestría, McLaren decidió crear un departamento de ingeniería de materiales y me invitaron a hacerme cargo de esa área”.
Podmore es responsable de todas las investigaciones relacionadas con los materiales compuestos dentro de McLaren Automotive. “Paso el día en el laboratorio trabajando en experimentos, probando el rendimiento de los materiales o realizando revisiones técnicas para otros ingenieros en función de los resultados que obtiene en su laboratorio”, cuenta.
Su trabajo se puede ver en los últimos vehículos de la compañía como el McLaren 765LT, el roadster Elva y el recientemente revelado McLaren Artura, el primer híbrido de alto rendimiento de producción en serie.
Los monocascos de estos súper deportivos están fabricados casi completamente de materiales compuestos, reservando el aluminio para las puertas y el capó.
