Si bien en la actualidad los autos eléctricos son algo cotidiano no sucedía lo mismo en 2012. Por eso llamó mucho la atención cuando en aquel momento Mercedes decidió electrificar uno de sus vehículos más emblemáticos, el Mercedes SLS AMG “alas de gaviota”.
Este deportivo, que se produjo entre 2010 y 2014, montaba un V8 de 6.2 litros con 590 caballos. Aprovechando su fama y trascendencia, la casa alemana decidió crear una versión eléctrica a la que llamó Mercedes SLS AMG Electric Drive y que se basó en el prototipo SLS AMG E-CELL presentado en 2011.
Al modelo se le reemplazó su mecánica original por cuatro motores eléctricos con una potencia total de 751 CV y 1.000 Nm de par máximo. Esto le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3,9 segundos y tener una autonomía de 250 kilómetros, menos de la mitad de lo que prometen los eléctricos de hoy en día.
Si bien la marca alemana había anunciado que el Mercedes SLS AMG Electric Drive tendría una producción limitada a 100 unidades a un precio de 400.000 euros cada una. La realidad es que ni siquiera llegó a producir el 10 por ciento de esa cantidad ya que solamente fabricó nueve de estos vehículos.
Uno de esos ejemplares ha sido puesto a subasta por RM Sotheby’s en Europa a un precio base de 1,05 millones de euros, algo lógico teniendo en cuenta la particularidad del modelo.
