Sabemos, desde que se convirtió en el rey de la televisión argentina, dejó de lado aquel “look gomazo” e hizo un culto de su imagen. Hagamos un breve repaso... Es difícil establecer una fecha, pero en 1994 Tinelli le dio el primer giro profundo a su estilo. Aquel año modificó su alimentación, empezó a lucir más delgado y dejó crecer su pelo. “Hace ocho meses que no como carne”, explicaba el cambio. Pasaron tres años y en 1997 hubo otro cambio radical: reemplazó la informalidad por las camisas oscuras con cuellos Mao, incorporó los trajes italianos, los anteojos estilo Lennon y se dejó crecer el pelo.
En 2005, cuando se mudó a Telefe, estrenó el peinado con el pelo más largo. Durante 2009 comenzó el verano con un estilo David Beckham: sus hijos lo raparon y su hija mayor, Candelaria, le creó un diseño de figuras religiosas que finalmente el tatuador Mariano Antonio selló a fuego y tinta en su brazo. Y allí arrancó la última etapa, la de los tatuajes...
Lo cierto es que el viernes 8 de octubre viajó a Punta del Este junto a su amigo Hernán de Laurentis, para instalarse en su chacra marítima (Guanahani), tomar sol, jugar al fútbol y ¡revelar sus flamantes dibujos del brazo izquierdo! “Comenzó a hacérselo a mediados de 2010, y ya casi lo tiene terminado”, cuentan sus cercanos. ¿De qué se trata? El especialista Hernán Coretta trazó en su brazo una serie de diseños chinos superpuestos (una geisha, peces carpa, rocas, mar…), a lo largo de tres sesiones de cinco horas cada una. Aún resta una última en la que terminará con las formas finales del dibujo.
A un año y nueve meses de mostrar la virgen grabada en su brazo derecho, el conductor vivía un momento de introspección que culminó con la separación de Paula Robles tras catorce años de relación. Esta vez eligió dibujar en el izquierdo a otra mujer, una geisha, una imagen bien transgresora. Si en aquella ocasión cerró el ciclo de un amor, ¿con ésta abrirá otro?
El viernes 8 de octubre viajó a Punta del Este junto a su amigo Hernán de Laurentis, para instalarse en su chacra marítima (Guanahani), tomar sol, jugar al fútbol y ¡revelar sus flamantes dibujos del brazo izquierdo!
Cuando se someta a la cuarta y última sesión, finalizará su gran tattoo y tendrá los dos brazos completamente cubiertos.
