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Un amor en carrera

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Hace un año y medio, cuando se conocieron en el circuito de Paraná, el bramido de los motores de Turismo de Carretera fue su canción de amor. Ella era promotora del equipo del piloto Fabián Acuña. El, fanático de los fierros y amigo íntimo del corredor Roberto Del Bo, al que sigue siempre que sus obligaciones se lo permiten. Ella acababa de romper con su novio santafesino. El estaba en p
lena crisis con su mujer, Jaqueline Dutra. "¿Quién es esa

morocha?", preguntó el goleador a su amigo Del Bo. La morocha en cuestión -1,74 metro de altura y ojos verdes- lucía entonces un enterizo de vinilo negro, que remarcaba sus impactantes curvas, como parte del uniforme exigido por la empresa de combustibles para la que trabajaba.

Desde aquel día, entre Martín Palermo y Lorena Barrichi nació un amor al que no le importaron ni las circunstancias ni las distancias.
"Palermo se enamoró perdidamente de Lore", cuenta una de sus ex compañeras que prefiere no dar su nombre.
"El venía de Buenos Aires a visitarla a Paraná en un avión privado", continúa. El romance se mantuvo semioculto durante siete meses, tiempo en que la relación se afianzó, al punto en que ella les decía en privado a sus amigas:
"Martín me aseguró que si le sale algo afuera, lo acompaño". Y el futbolista cumplió. A fines de enero, ya separado definitivamente de Jaqueline, se concretó su pase al Villarreal, y a mediados de febrero, Lorena se reunió con él en España. Desde entonces, la pareja comparte una residencia en Bencasim, un pueblo sobre el Mediterráneo.

Ahora la pareja está de visita en Buenos Aires. El vino para ver a sus hijos Aline (8) y Ryduan (4) y para terminar todos los papeles de su divorcio con Jaqueline. Lorena, por su parte, aprovechó para visitar a su mamá en Paraná. Y el fin de semana pasado decidieron revivir aquel primer encuentro en boxes en la competencia del
TC en Rafaela. El sábado llegaron a las tres de la tarde al autódromo en el BMW 328i gris de él, para ver las clasificaciones. Martín, de jeans celestes y suéter negro.

Ella, con jeans superajustados y una remera blanca que dejaba su ombligo al aire. De la mano, visitaron los boxes de su amigo Roberto Del Bo, que orgulloso contó cómo nació su relación con el futbolista:
"Nos conocimos allá por el 99 en una carrera en La Plata. Martín ya era goleador en Boca, pero estaba suspendido. Nos hicimos muy amigos. Tanto, que cada vez que puede viene a alentarme. Por ahora, el pobre no puede probar el auto conmigo porque tiene contratos muy importantes que se lo prohíben. Pero me dijo que en cuanto pueda, quiere subirse como copiloto. Es un fierrero
viejo
", dice sonriente.

En boxes, Martín y Lorena se hicieron mimos y charlaron al oído. Después, mientras él firmaba autógrafos y conversaba con Marcos Di Palma, ella se fue a recorrer el autódromo para saludar a viejas compañeras.
"Lo bueno es que Lore sigue siendo la misma chica sencilla de siempre", comentó Isadora (27), una promotora que compartió muchos años de carreras de
TC y TC 2000 con Barrichi. El almuerzo -choripán y hamburguesas- fue en el tráiler de Del Bo, pintado en azul y oro, al igual que su cupé Chevy (¿será pura coincidencia?). Por la noche, la pareja compartió una suite en el Parra hotel & suites, en pleno centro rafaelino.

El domingo, con los nervios de la final, Palermo llegó al autódromo poco antes de las diez. Le deseó suerte a su amigo -por desgracia, Del Bo abandonó en la vuelta 9- y siguió la carrera desde una estratégica curva del circuito. Lorena, en cambio, prefirió verla por televisión en el tráiler del equipo de Fabián Acuña, con sus ex compañeras.

A las cuatro, Martín y Lorena se despidieron de los pilotos y recorrieron por última vez la calle de boxes tomados de la mano. Felices, reviviendo aquel amor que nació hace 14 meses, entre el bramido de los Turismo Carretera.

María Calatayud
fotos: Alejandro Carra
(enviados especiales a Santa Fe)
Martín y Lorena llegan de la mano al autódromo rafaelino, a las tres de la tarde del sábado. El futbolista, para alentar a su amigo Roberto Del Bo. Ella, para saludar a sus ex compañeras que siguen haciendo promociones en el <i>Turismo de Carretera</i>.<br />

Martín y Lorena llegan de la mano al autódromo rafaelino, a las tres de la tarde del sábado. El futbolista, para alentar a su amigo Roberto Del Bo. Ella, para saludar a sus ex compañeras que siguen haciendo promociones en el Turismo de Carretera.

Lorena Barrichi, una diosa por donde se la mire. La novia de Palermo recorrió los boxes para saludar a sus ex compañeras y a los pilotos.

Lorena Barrichi, una diosa por donde se la mire. La novia de Palermo recorrió los boxes para saludar a sus ex compañeras y a los pilotos.

Martín pasó la mayor parte del tiempo con su amigo, el corredor Roberto Del Bo. Luego, para dejar el circuito, tuvo que

Martín pasó la mayor parte del tiempo con su amigo, el corredor Roberto Del Bo. Luego, para dejar el circuito, tuvo que "escapar" en un cuatriciclo, debido al acoso de sus fans.

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