En los últimos días, las fuerzas rusas han intensificado su ofensiva contra Ucrania y continuan desplegando su asedio alrededor del país. Tal es el caso de la ciudad de Mariúpol, en el sureste del país, quien lleva días sitiada tras la llegada del ejercito ruso.
En ese marco, este martes se conoció la historia de Tanya Moroz, una nena de apenas seis años que murió deshidratada bajo las ruinas de su casa destruida en Mariúpol, asediada por los rusos, según el alcalde de la ciudad, Vadim Boitchenko.
El caso de Tanya cobró notoriedad luego de que algunos diputados y hasta el mismísimo presidente de Ucrania manifestaran que Rusia "rompió tres veces la promesa de un corredor humanitario, disparando misiles contra civiles" y tomaran como ejemplo el caso de la nena de 6 años.
Datos del fatídico caso de Tanya
Según denunció la diputada ucraniana Lesia Vasylenko, luego de ocho días sin acceso a agua tras la muerte de su madre en los bombardeos de Mariupol, la nena falleció bajo los escombros de su casa.
"Esta niña se llamaba Tanya Moroz, no tenía ni siete años. Esta mañana, ella y su madre fueron asesinadas por los ocupantes rusos cuando intentaban asaltar la ciudad bajo la apariencia de un corredor humanitario en Mariúpol", recitaban el relato del desgarrador hecho.
Por su parte, el alcalde de la ciudad agregó a través de la cuenta de Telegram del municipio: “En los últimos minutos de su vida, (Tanya) estaba sola, exhausta, asustada y terriblemente sedienta. Esta es solo una de las muchas historias que suceden en Mariúpol, que está sitiada desde ocho días”.
En tanto, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, también se refirió al desgarrador caso de Tanya y a través de un video difundido este martes pasado, pidió una vez más a los países occidentales que ayuden a Ucrania en su lucha contra Rusia. “Mariúpol está rodeada, bloqueada, está exhausta, torturada”, dijo.
Y agregó: “Por primera vez en décadas, quizás por primera vez desde la invasión nazi, un niño murió de deshidratación”, exclamó Zelensky.
Asimismo, funcionarios de la ciudad de Mariúpol informaron que unos 300.000 civiles llevan días inmovilizados por los combates en el puerto estratégico de la ciudad, en el sureste del país, en el Mar de Azov, quienes se encuentran privados de agua, alimentos y electricidad y sin acceso a la ayuda humanitaria.
