Con mucho respeto a tus fans… ¡Yo soy tu fan número uno!.”
Así, en apenas doce palabras en Twitter, y cargando una foto de David Bisbal (35) en el escenario, María Eugenia Suárez Riveiro (22) terminó de ponerle moño a una visita que ambos soñaron. Porque claro, el cantante español se lo había pedido días atrás desde su cuenta: “¿No podrías tomar un vuelo ahora mismo y venirte conmigo?”. Y ella no logró resistirse… Lo cierto es que la protagonista de Camino al amor (Telefe, 22:15) tomó el guante y se subió al primer avión, rumbo al aeropuerto de Barajas.
Una vez allí, después del emotivo encuentro, la pareja viajó hacia Almería, la ciudad natal de él, donde brindaría un show para diez mil personas. Antes de eso, aprovechando los casi 30 grados de calor, la pareja disfrutó de un paseo en yate por la Costa del Sol, que la actriz además se dio el gusto de compartir con Ella, la hija de cuatro años del cantante y su ex, la diseñadora Elena Tablada. Semejante dato no resultaba menor, ya que, cuando David pasó por Buenos Aires en pleno Mundial Brasil 2014, había conocido a Rufina, la hija de la China y Nicolás Cabré.
Lo cierto es que todo salió como lo habían planeado en una romántica semana en la que, por si fuera poco, María Eugenia también compartió momentos con el resto de los Bisbal. “Les presento a María Eugenia, la mujer de mi vida”, dijo David al momento de presentar a la blonda en un almuerzo familiar el fin de semana. A la hora del show, todos se ubicaron en el vip situado al costado del escenario. “Tan sólo tú y yo con nuestro atardecer somos unos náufragos huyendo del ayer”, entonó pronto el cantante de moda en España y Latinoamérica, y pronto los ojos deslumbrados de ella –luego de la salida en yate, de compartir el hogar, de las charlas con Ella, de los besos con Bisbal, del contacto con los suyos, y ahora, en pleno recital– supieron que esas palabras le pertenecían.
Ya dentro del yate, la China, David y su hija Ella sueltan amarras para pasar el fin de semana navegando por la Costa del Sol. Hora de prepararse para disfrutar de un ansiado e inolvidable momento.
Bisbal posee una casa en la zona residencial de Almería. Aunque está instalado en Madrid junto a su hija, nunca quiso vender esta casa en la que el fin de semana almorzó junto a la China. Ella, su hija, su hermana María del Mar y su sobrino Nacho. A pesar del acoso que sufre de fans y los paparazzi cada vez que visita su ciudad natal, el músico salió a pasear y navegar sin problema con su flamante pareja argentina.
Tras una semana de vuelo rasante en España, la China regresó el lunes al país desde Ezeiza. Su hija Rufina (1) quedó a cargo del ex, Nicolás Cabré.
