Dicen que le tomó el gustito. Hace unos días Gabriel Omar Batistuta (38) había jugados unos chukkers en La Pampa acompañado por el Lolo Castagnola, una de las figuras de La Dolfina. Pero el viernes 25 de enero hizo su presentación triunfal en el exclusivo club La Herradura de Pinamar en el marco del Argentina Polo Tour, integrando el equipo Patio Bullrich junto a Adolfito Cambiaso –su anfitrión durante toda la estadía–, Diego Sastre y Nicolás Pieres. Su equipo ganó 7 a 6 y Bati metió dos goles. El primero en una veloz corrida –fiel a su estilo futbolístico– tras pase del número 1 del mundo. Y el segundo, dándole coscorrones a la bocha. Demostró ser un excelente jinete y gran predisposición para el juego. ¿Nace otra estrella del polo? Contesta Adolfito Cambiaso: “Me sorprendió Gabriel porque demostró mucha ubicación en la cancha y además metió dos goles. Sabemos que anda muy bien a caballo porque nació en el campo, pero otra cosa es jugar. Veremos cuánto sale su pase para traerlo a La Dolfina”, bromeó. Antes del partido, Batistuta almorzó en UFO Point y luego tomó café en Innsbruck. El sábado, antes de regresar a Reconquista para reencontrarse con su familia, jugó al golf, otra de sus nuevas pasiones. Y también charló con GENTE de muy buen humor.
–¿Cómo nació tu pasión por el polo?
–No lo sé... Siempre tuvimos caballos en casa en Reconquista. Y ahora empezamos a jugar al polo. Antes no lo hacíamos, andábamos a caballo nada más. Yo diría que tampoco ahora juego, acompaño, me meto en el lío y nada más. Jugar al polo es lo que hace Cambiaso. Lo mío es más tranqui.
–¿Lo tuyo es como si fuera jugar un picado en el fútbol?
–Exactamente. Trato de encontrar el juego, de ubicarme, de aprender. Estoy en esa fase, veremos cómo sigo.
–¿Y te resulta fácil o difícil?
–Arriba del caballo me defiendo bastante bien. Se me complica nada más cuando hay que pegarle a la pelota.
–La verdad, Bati, ¿te divertís o sufrís más de la cuenta intentando jugar?
–Me encanta el juego y los caballos. Jugar me sale como algo muy natural porque siempre me gustaron los caballos y sé montar y andar muy bien. Es un ambiente más que conocido para mí, sacando el taco y la bocha, ja, ja, que es lo complica el polo. Sino, sería perfecto. Nadie nace sabiendo así que tengo mucho tiempo para aprender.
–¿Vas a practicar en tus campos de Reconquista en Santa Fe?
–No, los campos son para las vacas…
–Te escuché reflexionando con preocupación sobre cuestiones que tienen que ver con el campo y la ganadería.
–No soy experto pero entiendo sobre el tema. Nosotros no estamos preocupados por lo que producimos ni por lo que tenemos, la preocupación es por las retenciones que nos hacen desde el Gobierno. No sabemos adónde van a parar. No quiero profundizar demasiado, pero hago el comentario porque a todos los hombres del campo los inquieta este tema, no sólo a mí.
–Entonces le preocupa la política que desarrollaba el gobierno de Néstor Kirchner y ahora el de Cristina Fernández.
–Mirá, lo que queda claro es que en la Argentina no se le da importancia al campo, lamentablemente es algo que sucedió siempre. Las medidas que se aplican dependen de cómo se levanten los funcionarios de turno. Siempre los perjudicados son los mercados, los inversores y el campo mismo.
–Hablando de fútbol, ¿vas a ser o no director técnico? Porque amagaste con comenzar pero no se dio.
–Claro que voy a ser entrenador, pero no sé cuándo. No estoy apurado tampoco ni es un tema que hoy me preocupe, sinceramente. Sé que tarde o temprano voy a dirigir agl;un equipo.
–¿Tuviste ofertas concretas, de Boca por ejemplo?
–No, se habló de Boca, pero antes de que alguien me pudiera llamar me bajé, dije que no.
–Bueno, pero viste cómo es el fútbol… Quizás a las tres o cuatro fechas te necesita algún club y te llama.
–Sí, pero hoy no estoy a disposición. Pero si me llama Cambiaso para La Dolfina voy hoy, mañana, y pasado también.
–O para dirigir a Nueva Chicago ya que él generó ese vínculo de amistad con el equipo de Mataderos, hoy en el Nacional B.
–Claro, sí, Chicago podría ser, ¿por qué no?
–¿Cómo está tu familia, Irina, tu mujer y tus hijos, se readaptaron a vivir en la Argentina?
–Todos están muy bien, muy felices de estar acá, eso es lo principal.
–¿Vos estás bien? Porque se dijo que tenías una lesión o una complicación en los pies que te dificultaba hasta caminar. ¿Es cierto?
–Tengo un serio problema en los tobillos, pero como no juego más al fútbol no es tan preocupando.
–¿Pero estás recuperado o es serio?
–No, no estoy bien, estoy mal, esa es la verdad.
–¿Por qué se te produjo semejante dificultad?
–Y, de tantas patadas que recibí en las canchas… Gajes del oficio. La dificultad la tengo en los dos tobillos.
–¿Es tan grave que te complica hasta para caminar?
–Para caminar sí que me complica, no tengas dudas. Por eso ahora estoy tratando de subir al caballo...
La veloz corrida de Batistuta en busca del gol, su obsesión; antes en el fútbol, ahora en el polo. Hizo dos y su equipo ganó por 7 a 6.
Batistuta y Cambiaso fueron la atracción de la tarde. “Vamos a pedir cotización por su pase para traerlo a La Dolfina”, bromeó el mejor polista del mundo, que entre chukkers, le dio indicaciones al goleador.
El team ganador de Patio Bullrich integrado por Adolfito Cambiaso, Diego Sastre, Nicolás Pieres y Gabriel Batistuta derrotó al equipo Coca Cola Zero y se llevó la Copa Fernet Branca-Escorihuela Gascón. Bati fue el más requerido a la hora de los autógrafos y las fotos.
