«Siempre le voy a estar agradecida a Bandana« – GENTE Online
 

"Siempre le voy a estar agradecida a Bandana"

Actualidad
Actualidad

Un día decidieron que era mejor que se acabara, que había estado bien pero que ya era hora de que cada una siguiera por su lado. "Aprendimos lo que había que aprender y ahora necesitamos buscar nuevos espacios", explicó Virginia (23) por esos días. Las chicas que una tarde habían llegado a un casting en la cancha de Ferro, que habían quedado y habían formado un grupo, grabado varios discos, llenado teatros (¡más de cien veces el Gran Rex!) y estadios, cantado en Broadway… en fin, las chicas que se habían convertido en popstars, decidieron volver a sus casas. Y entonces, después de unas cuantas noches de despedida sobre el escenario del Gran Rex y de un último disco póstumo y en vivo, en abril de 2004 se acabó Bandana.

Entonces, Virginia Da Cunha volvió a su pequeño departamento de Belgrano y se puso a estudiar baile, canto y acrobacia, otra vez. "Después de tanta exposición con Bandana, necesitaba volver a mí, conectarme más con lo que me estaba pasando", explica ahora. Pero no le duró demasiado: al mes la llamó Gastón Portal para hacer un programa infantil todas las mañanas en Canal 9. Y dos meses después, otro llamado. Esta vez, Jorge Guinzburg le ofrecía protagonizar, durante el verano, Aguante el circo, una obra infantil en el teatro Acuario de Carlos Paz. Y ella aceptó.

-¿Por qué?
-Porque siempre me entendí muy bien con los chicos; en Bandana eran los que más me seguían. Además, es lo que yo quise hacer desde que empecé a bailar. Cuando era chica, soñaba con tener un programa infantil como el de Xuxa, que era mi ídola. Después se me pasó y ahora volví: uno siempre vuelve.

-¿Le perdiste el miedo a las cámaras?
-Me sigue dando un poco de miedo la exposición, yo no me quiero hacer cargo de lo de figura famosa o lo de estrella. Eso para mí es muy ajeno. Cuando apareció Bandana, el casting no decía nada de la televisión, así que cuando aparecieron las cámaras me asusté un poco, pero como me gustaba tanto el proyecto artístico, lo acepté como era. Y ahora, con el programa infantil es parecido, sólo que llegar a tantos chicos es una gran responsabilidad, tenés que ser un modelo y tenés que educar.

-¿Y por qué teatro en Carlos Paz?
-Cuando me dijeron que iba a ser una especie de Cirque du Soleil y en Córdoba, que es donde nací, no lo dudé. Justo había empezado acrobacia, me estaba preparando para el programa y qué mejor preparación que una obra infantil. Además, todo lo que tenga que ver con la expresión corporal me fascina. También me habían ofrecido hacer una participación musical en teatro de revista, pero al final quedó en la nada. Y es mejor, porque hubiera sido medio incoherente hacer teatro infantil y de revista al mismo tiempo.

Mientras se lleva adelante la producción fotográfica en una playita sobre el lago San Roque, apenas alejada de Carlos Paz, suena un celular dentro de un bolso. Virginia corre y se apura a contestar: "Era Milton, mi novio. Me llamó porque hoy cumplimos dos años y medio juntos. Vino para el estreno, pero ahora está en la costa, con su banda", se excusa Virginia, quien hace dos años y medio sale con Milton Amadeo, un ex Mambrú que ahora prueba suerte como solista. "Está muy contento con mi incursión en el género infantil, me apoya un montón", dice. Mientras, algunos chicos se le acercan a pedirle un autógrafo o sacarse una foto con la ex Bandana: parece que por un largo tiempo, Virginia va a seguir siendo "Virginia de Bandana".

-¿Te molesta?

-No, al contrario. Siempre le voy a estar agradecida a Bandana, me dio mucho manejo del escenario, mucha seguridad. Nunca podría haber hecho nada de lo que estoy haciendo si antes no hubiera pasado por ahí. De hecho, queremos que la música sea el pilar del programa, porque es mi fuerte. Es lo que yo traigo, lo que la gente conoce de mí.

-¿Te pesa estar sola sobre el escenario, ser la cara del espectáculo?
-Un poco. Antes había mucha conexión con las chicas en el escenario, nos cantábamos entre nosotras. Eso se extraña mucho y se siente, pero a la vez ahora me siento más libre. Bandana era el proyecto de una empresa que nosotras tratamos de hacerlo nuestro, pero en un origen era de ellos. Hoy, en cambio, es un proyecto mío desde el primer paso. Y eso me da mucha más libertad, porque no hay nada con lo que no me identifique o no pueda defender.

-¿Seguís escuchando los discos de Bandana?
-En casa soy más de escuchar jazz, soul, música más tranquila; pero el otro día se me dio por poner uno de los discos y me re emocioné, se me puso la piel de gallina. Hacía mucho que no lo escuchaba y me encantó. Cada vez que escucho Bandana, me enorgullece haber estado ahí.

Si tuviera que volver atrás, más allá de todos los problemas, nunca dudaría en atravesar otra vez la experiencia de Bandana", asegura Virginia.">

"Si tuviera que volver atrás, más allá de todos los problemas, nunca dudaría en atravesar otra vez la experiencia de Bandana", asegura Virginia.

Siempre me entendí muy bien con los chicos. En Bbandana eran los que más me seguían"">

"Siempre me entendí muy bien con los chicos. En Bbandana eran los que más me seguían"

Más información en Gente

 

Más Revista Gente

 

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig