Los ojos de Rocío Marengo (23) se enfurecían y pintaban tan grises y celestes como el huracanado cielo que invadía las playas marplatenses. Su infancia no son buenos recuerdos, precisamente. Ahí están los primeros doce años viviendo en el campo, la separación de sus padres, su adolescencia en Bahía Blanca, el seleccionado de hockey.
¿Una fantasía? Jugar a ser Xuxa o Susana Giménez en su casa. Y una niña que empieza a despertar pasiones: el primer beso -a los doce, trece años, nomás- en la esquina de su casa con Babo. "Todavía estábamos en Bahía. Y era el único chico que me gustaba", dice. Aparecen también las enseñanzas y garra incansable de su madre para sacar a la familia adelante. Y, cómo no, "las travesuras con mis hermanos, Sol (26) y Pipi (18)". Ya había empezado a estudiar cocina y repostería, y por esa época, también, salió elegida reina del boliche más top de la ciudad. Entonces empieza una nueva etapa.
A los 18 años decide pegar el salto a Buenos Aires. Trabaja de promotora, hace desfiles para Utilísima Satelital, pasa a ser secretaria en El precio justo, el programa de Fernando Bravo, de ahí a notera en Mar de Fondo junto a Alejandro Fantino, y panelista de Acorraladas, con Lía Salgado. Vino la experiencia en Tetanic, con Chiche Gelblung, su paso por La peluquería de los Mateos, y este verano debutó en teatro en La risa está servida, junto a Sergio Gonal.
-¿Por qué decidió venir a Buenos Aires y dejar todo lo que tenía en Bahía Blanca?
-Vine porque quería cocinar en la televisión. Apenas llegué me puse a estudiar repostería, y además empecé a jugar al hockey y a hacer promociones. Así, de a poco, surgieron los primeros castings. En cuanto me enfoqué en el ambiente artístico, decidí estudiar baile, canto y teatro. Cuando hago balance, siento que todo me costó mucho. Todo lo que conseguí hasta ahora fue por ser muy perseverante.
-Cuando era chica quería ser como Susana o Xuxa… ¿Hoy con qué sueña?
- Hoy, quiero encontrar un hombre bueno para formar una familia. Y en lo profesional, me gustaría conducir un programa de juegos y seguir haciendo teatro de revista.
Pero antes que pensar en mi carrera, lo que más me interesa es mi vida personal", dice.">
En octubre se hizo una cirugía de lolas con Horacio López Carlone. "Pero antes que pensar en mi carrera, lo que más me interesa es mi vida personal", dice.
