Lucía Celasco, la nieta mujer de Susana (el otro nieto se llama Manuel, de 13), sopló las 15 velitas y tuvo fiesta con sus compañeras de tercer año del colegio San Martín de Tours en noviembre. Pero el mejor regalo empezó a hacerse realidad la noche del viernes 12 de diciembre, cuando junto a Susana –a quien ella llama Kika porque a Su no le gusta que le digan “abuela”– embarcó en la Primera Clase de Air France. Destino: París.
En realidad, las vacaciones de Susana habían comenzado el jueves, pasada la medianoche, una vez que terminó su programa, en el que Oscar González Oro le hizo un reportaje y repasó toda su vida. Hubo, además, gran cena en Rosa Negra, en San Isidro. Y al día siguiente: armar las valijas con ropa de invierno.
En Ezeiza, Susana dijo de su única compañera de viaje: “Lucía es la más parecida a mí; por eso nos llevamos de maravillas… Compartimos el gusto por la moda, el maquillaje, la música. Tenemos grandes charlas, jugamos a la canasta y al burako. Somos muy compinches, de verdad”. ¿Planes? “Compras y tours sorpresa”, concluyó.
Lucía –cancherísima, toda de negro– sonrió cómplice para las cámaras. Sabe que Kika será una guía de lujo y conoce cada rincón de París (adonde viaja dos veces por año desde hace tres décadas) como nadie. 
Su y Lucía partieron a París el 12 y volverán para Navidad. “El 2009 lo recibiremos todos juntos en Punta”, anunció la diva.
