Carolina Pampita Ardohain posa sin pudores frente al centenar de curiosos que rodea ahora este set de producción improvisado a orillas del mar. Luce exquisita, apenas cubierta por un generoso minibik. Nada ha cambiado. Tan sólo el brillo de una alianza en su mano izquierda delata su nueva condición de mujer casada: ahora es "la señora de Barrantes". Luego del último flash, Pampita regresa al parador de La Caseta Coca-Cola, se entrega mansa a una interminable rueda de autógrafos, y responde con una sonrisa a cada piropo. Incluso aquellos que minutos atrás se repetían en frases tales como "dejámela dos minutos y te aseguro que se divorcia" o "yo te puedo enseñar lo que es bueno" ahora coinciden en respetuosos elogios ("sos divina", "me encantás" y cosa por el estilo…). Pampita pronto se despide de su público y accede a la entrevista. Y vuelve a sonreír, por supuesto.
-¿Cómo vive hoy su nueva vida de casada?
-Muy feliz. Pero el casamiento no cambió mi vida: con Martín seguimos con el mismo ritmo de antes. Después de este descanso que nos tomamos, ya pensamos en volver con todo a nuestras actividades.
-¿En qué momentos se descubre como una verdadera ama de casa?
-Desde que vine a vivir a Buenos Aires soy responsable de todo lo que tiene que ver con sostener un hogar. Antes estaba sola, ahora comparto estas tareas con Martín. Pero preferiría no seguir hablando de mi vida porque quiero resguardar mi pareja de tanta exposición. Yo sé que en otro momento quizá me abría más fácil, pero ahora aprendí que es mejor hablar sólo de trabajo…
-¿Su condición de mujer casada la limita en su carrera como modelo?
-Para nada. Los dos conocemos perfectamente este trabajo y sabemos los sacrificios que requiere. Son las reglas del juego y, además, Martín me apoya en mi carrera. Por el momento voy a viajar todo lo que sea necesario para responder a cada uno de mis compromisos.
-¿Entonces, la señora de Barrantes incluso sería capaz de protagonizar un desnudo?
-No tengo pudores con mi cuerpo y nunca digo "esto no lo hago" sin saber perfectamente de qué se trata o para qué se hace. Yo no tendría problemas en hacer un desnudo si el papel y la producción lo requieren. No se trata de un problema económico, no me importa "cuánto hay", sino que el desnudo tendría que ser imprescindible para alcanzar un objetivo bien claro. No me interesa mostrar por mostrar.
-¿Su carrera como modelo podría postergar sus deseos de ser madre?
-Nunca me lo planteé de esa forma. Por el momento no está en mis planes ser mamá pero no porque pueda cortarme la carrera, sino porque creo que todavía tengo que vivir otras etapas en mi vida y en la pareja. Además, ¡todavía no cumplí los dos meses de casada!
Carolina Pampita Ardohain recibió el nuevo año en la estancia El Pucará, sobre el límite que divide a las provincias de Buenos Aires y La Pampa (N. de la R.: el mismo lugar donde, en diciembre, festejó su boda). Junto a su marido, Martín Barrantes, por supuesto. Ahora, aún en el parador de Coca-Cola en el balneario La Caseta, repasa su último año laboral. "El 2002 fue muy intenso -define-. Viajé muchísimo por cuestiones de trabajo, y si bien extrañé horrores, lo viví como una etapa de gran crecimiento. Hice mi segunda campaña de Vanity Fair en Nueva York, debuté como actriz en Rebelde Way y fui co-conductora de El show de Flo en la televisión española".
Su agenda para este 2003 repite también compromisos por todo el mundo. La señora de Barrantes anhela volver a la televisión. "Quiero hacer ficción o volver a conducir", asegura. Aunque luego dirá que tampoco descarta la posibilidad de calzarse plumas para subir al escenario de un teatro de revistas.
Sin embargo, el 2003 no comenzó de la mejor forma para Carolina Pampita Ardohain: el jueves 2 de enero su tío abuelo Bernardo Antonio Ardohain -87 años y ex intendente de la ciudad de Toay, a tan sólo 10 kilómetros al sudoeste de Santa Rosa- fue asaltado y violentamente golpeado por tres jóvenes. Aún hoy permanece en coma, inconsciente, internado en la sala de cuidados intensivos de la Clínica Modelo Santa Rosa. Pampita prefiere no hablar al respecto, aunque luego se confesará "muy apenada" por el dolor que está padeciendo su familia. Y no dirá más.
Ahora se despide. La multitud sigue sus pasos hasta más allá de los límites del parador. Ella promete regresar pronto. Y vuelve a sonreír.
Por el contrario, Martín me apoya en todo lo que tiene que ver con mi carrera", insiste la modelo en La Caseta Coca-Cola.">
Pampita prefiere resguardar su intimidad; sin embargo, confesó que su estado civil actual no interferirá en su rutina de trabajo. "Por el contrario, Martín me apoya en todo lo que tiene que ver con mi carrera", insiste la modelo en La Caseta Coca-Cola.
Nada cambió con mi casamiento. Desde que vine a vivir a buenos aires soy responsable de todo lo que tiene que ver con sostener un hogar. Antes estaba sola, ahora comparto estas tareas con Martín"">
"Nada cambió con mi casamiento. Desde que vine a vivir a buenos aires soy responsable de todo lo que tiene que ver con sostener un hogar. Antes estaba sola, ahora comparto estas tareas con Martín"
