No volvieron a vivir bajo el mismo techo. “Es muy pronto…”, advierten. Sin embargo, Carla Conte (30) y Guillermo Bruto (32) reconocen que están superando la crisis que los mantuvo separados durante 62 días. “Le estamos dando otra oportunidad a la pareja”, insisten. Más adelante confesarán que nunca dejaron de hablarse, que siempre se sintieron cerca y que la relación se resintió por la vorágine de la televisión. Bailando por un sueño, en sus distintas versiones, con sus treinta y pico de puntos de rating... Un rush demasiado poderoso. Aun en plena crisis dijeron que se seguían amando. “Pero descubrimos que ya no podíamos convivir”, repetían. Nada estaba demasiado claro para ellos. Aunque siempre tuvieron la certeza de que su love story merecía una nueva oportunidad, un nuevo capítulo.
La reconciliación no tardó en llegar. El primer acercamiento ocurrió el martes 23 último, en los estudios de ShowMatch. Guillermo Bruto tomó la iniciativa: propuso una cita para el viernes siguiente. ¿Su plan? Ir a ver el recital de Chayanne en el estadio de River y después comer sushi en Puerto Madero. Carla Conte aceptó de inmediato. Un día antes de lo acordado, volvieron a encontrarse, otra vez en Ideas del Sur. Fue cuando Carla quedó eliminada de Bailando por un sueño 4 y Guillermo estuvo detrás del decorado para contenerla.
El viernes, antes de lo previsto, volvieron a tropezar en los estudios de Marcelo Tinelli. Carla estaba grabando Este es el show junto a José María Listorti, mientras que Guillermo preparaba al Teto Medina para su debut en la nueva versión de Cantando por un sueño. Cuando terminaron sus compromisos, se encontraron en el bar de la productora. Desde ahí partieron hacia el recital de Chayanne. Llegaron tarde, cuando sonaba Atado a tu amor. Bailaron y cantaron el resto de la lista de temas: Loco por vos, Antes de dormir, Cuidarte el alma…
Se fueron del estadio en medio de los bises. ¿Destino? El restó Donovan’s, de Puerto Madero. Comieron sushi y antes de partir definieron su relación: “Por el momento no vivimos bajo el mismo techo… Ojalá que este verano podamos volver a vivir juntos, porque los dos nos vamos a trabajar a Carlos Paz y nos queremos mucho. Yo voy con El Club de las Divorciadas, y Guille va a tocar con Take One, su banda de jazz-bossa. Si las cosas siguen tan bien, esta temporada viviremos en la casa que alquilé en Córdoba”.
Aunque Carla Conte no llegó a la final de Bailando por un sueño 4, jura que se siente feliz. “Ahora estoy más tranquila. Fue un año bravísimo y, aunque me pasó de todo, el balance es positivo. Con Guille luchamos por nuestra relación porque sabemos que nos queremos y eso es lo importante. Yo soy fan de Guille y en noviembre voy a ser la primera en venir a este restaurante a escucharlo cantar. Después, con Damián (su pareja en Bailando…) vamos a ir a Formosa para cumplir su sueño: darle un medio de transporte a los alumnos de la Escuela Especial Nº8 de Laguna Blanca, Preciosísima Sangre de Cristo, que trabaja con chicos con capacidades diferentes”, dice la morocha más deseada de la televisión. Está claro: su reconciliación con Guillermo Bruto ya no es un rumor, sino una realidad. 
Después de ver el recital de Chayanne en River fueron a comer sushi a Puerto Madero. Allí se besaron frente al fotógrafo de GENTE, sin pudor.
