“Nunca me enfrenté con Juana; la amo profundamente” – GENTE Online
 

“Nunca me enfrenté con Juana; la amo profundamente”

Actualidad
Actualidad

Todo empezó el miércoles 20 de abril. Mirtha tomaba el té en su piso de Avenida Del Libertador y buceaba por Internet, sin saber que al próximo clic detonaría una molotov en medio de su comedor. “El escándalo del año”, leyó, y vio las fotos de su nieta embarazada, a los besos con el ex ministro Martín Lousteau. “No entiendo por qué mi nieta actuó así embarazada, pero no puedo juzgarla: hoy tengo que apoyarla más que nunca”, nos dice la diva de los almuerzos. Un detalle no menor: la bomba estalló justo el día en que se cumplía un nuevo aniversario (el decimosegundo) de la muerte de su marido, Daniel Tinayre. “Traté de no ver televisión ni escuchar la radio. Uno quiere aclarar algunas cosas pero... ¿cómo salís a desmentir todo?”, explica el porqué de su ostracismo.
.............................................................................................
De allí en más se escucharon versiones de todo tipo: “Mirtha está depresiva”, anticiparon algunos. También dijeron que discutió fuerte con su nieta: “Arrastraste a nuestra familia al fango”, exageraron. Lejos de los chusmeríos de peluquería, sus amigos más íntimos afirman que en estas tres semanas Mirtha vivió uno de los períodos más dolorosos de su vida. Y aclaran: “Este momento viene después de la pérdida de su hijo y su marido”.
El fin de semana pasado, la conductora estaba invitada a la apertura de la temporada termal de Río Hondo y a un desfile en San Miguel de Tucumán, a fin de recaudar fondos para la Sociedad de Beneficencia. Claro que hasta último momento los organizadores dudaron de la presencia de la diva. Y no se equivocaban: “Por cuestiones personales he estado a punto de no venir. Pero hice bien en repensarlo; me siento reconfortada con tanto cariño”, aceptó la diva el viernes a la tarde, cuando pisó el aeropuerto de Santiago del Estero. Por la noche viajó hasta la vecina Tucumán, donde fue la anfitriona de un desfile organizado por la agencia de modelos New Face. Allí habló con GENTE por primera vez:

–¿Cómo vivió todo lo que ocurrió en estos días?
–Me sorprendió el cariz que tomó el tema en los medios de comunicación. Pero le confieso una cosa: yo nunca me distancié de Juanita. Tampoco hablaría mal de mi nieta, porque la amo profundamente.

–¿Por qué se comentó que usted estaba depresiva?
–Lo que ocurre aquí es que la gente confunde tristeza con depresión. Hay que tener cuidado, porque ése es un tema de salud. Gracias a Dios, soy una mujer que no conoce esa palabra.

–Dicen que el más enojado de la familia es Nacho.
–Nacho está muy dolido y sorprendido, igual que yo. Sinceramente no entendemos qué pasó ni por qué Juana actuó así. Pero uno no puede opinar sobre lo que pasa adentro de una pareja.
.............................................................................................
El sábado al mediodía, Mirtha regresó a Río Hondo y, como cada año que visita la ciudad termal, se instaló en el hotel Los Pinos. Ocupó las suites 117 y 119, las mejores del hotel, unidas por una puerta y acondicionadas especialmente para ella. A las dos bajó junto a su comitiva –unas ocho personas: su asistente Elvira, el representante Francisco Pérez Nazar, peinadores, maquilladores– al parque, donde los anfitriones prepararon un gran asado de campo –costillar y lechón, pollo, ensaladas y empanadas norteñas–. Se sentó en una mesa larga de tablones y caballetes junto al resto de los huéspedes del hotel, que cuando la vieron se pararon y la ovacionaron. Allí empezó a cambiar el gesto adusto de las primeras horas. Comió al aire libre, como una más.

A unos metros también estaba GENTE. “Con mi familia hemos pasado momentos muy duros, pero yo soy una persona que va al frente: de a poco vamos saliendo adelante”, nos contó después. En la intimidad del grupo que la acompañó en su paso por el Norte, la diva no tocó el tema directamente. Lo hizo por elevación: “Llegué triste y me voy feliz”, les dijo a sus amigos. Después del postre, Mirtha disfrutó de la siesta más popular del país.
..............................................................................................
A la noche, fue la encargada de tirar la primera bola de la temporada en el Casino de Río Hondo. Paradoja del destino: “¡Negro el 17!”, anunció el locutor. “La desgracia”. Sí, en uno de los momentos más duros que atraviesa su familia, Mirtha sacó el número de la mala suerte: “En el último tiempo me pasaron muchas cosas: los mismos que he recibido con cariño en mi programa me agravian. Hace un tiempo me robaron en el departamento; después, me investiga la AFIP, cuando yo soy una persona que siempre ha cumplido y pagado los impuestos. Aquí hay un trasfondo, pero no soy yo quien tiene que investigar”, nos dice Mirtha, que no se detuvo en la numerología y bajó al restó del Casino Center Hotel a cenar junto al gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y el ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer.

–¿Es cierto que usted le dijo a Juanita: “Arrastraste a la familia al fango”?
–¿Usted me imagina diciendo eso? Esa no es una expresión mía. Yo no uso ese lenguaje. Parece un libreto malo de una novela centroamericana. Le repito: nunca hablaría mal de mi nieta, porque la amo profundamente, con toda mi alma.

–¿Es cierto que en la ceremonia de los Martín Fierro va a reivindicar a su nieta?
–No, la verdad es que no lo hablé con Juanita. Unos días antes de que esto ocurriera me dijo que no iba a poder ir, porque el embarazo iba a estar muy avanzado. Pobrecita... La han criticado tanto por formar parte de la terna. No sé qué pasa que nos critican tanto.

–¿Hubiera pensado que podía pasar algo así en la pareja de Juana y Gonzalo?
–Para nada. Yo los vi tres o cuatro veces antes de la noticia, y era todo armonía. Estaban ilusionados con su bebé... y lo siguen estando. Una tarde fueron a tomar el té a casa y me comentaron que querían ir al Colón a ver al pianista Keith Jarrett; entonces los invité a mi palco.

–Y después, el aluvión mediático...
–Era inesperado todo esto que ha pasado. Por eso la sorpresa. Han sido muy crueles, como si quisieran destruirnos. Pero somos una familia muy bien constituida –no me gusta que nos digan “clan”–, y vamos a salir adelante. El domingo a las tres de la tarde, Mirtha dejó el hotel Los Pinos de la ciudad termal. “Llegué triste y me voy feliz”, les dijo a sus amigos después del fin de semana que pasaron juntos.

El domingo a las tres de la tarde, Mirtha dejó el hotel Los Pinos de la ciudad termal. “Llegué triste y me voy feliz”, les dijo a sus amigos después del fin de semana que pasaron juntos.

El viernes, día de su arribo a Tucumán, donde fue anfitriona de un desfile.

El viernes, día de su arribo a Tucumán, donde fue anfitriona de un desfile.

El viernes, Mirtha condujo un desfile en Tucumán. Al día siguiente almorzó al aire libre en Río Hondo junto a unas cien personas. Por la noche tiró la primera bola en el Casino junto al gobernador Gerardo Zamora, y el ministro de Turismo Enrique Meyer. El domingo se despidió, feliz.

El viernes, Mirtha condujo un desfile en Tucumán. Al día siguiente almorzó al aire libre en Río Hondo junto a unas cien personas. Por la noche tiró la primera bola en el Casino junto al gobernador Gerardo Zamora, y el ministro de Turismo Enrique Meyer. El domingo se despidió, feliz.

Más información en Gente

 

Más Revista Gente

 

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig