Cuando lo conoció creyó que era gay. El chico no se ofendió y la contactó por mail. La primera vez que la vio –con traductor de por medio– le anticipó que se iba a casar con ella. Le cantó, la enamoró. Y después de dos años de novios le propuso matrimonio. Sacó el anillo que había guardado durante todo el día en sus calzoncillos para que no se viera y no levantara sospechas y, durante una cena familiar en lo de Don Lopilato dijo en un castellano muy practicado: “Quiero casarme con Lu”. Todos lo miraron. Silencio en la mesa. Repitió él: “Quiero casarme con Lu”. ¿La respuesta? Carcajadas a coro de toda la familia, que casi en tono de burla decían: “Sí, sí, lo dijiste bien”, pensando que se trataba de una práctica de idioma. Pero después el novio se arrodilló e insistió con su propuesta. Iba en serio. Aquel primer anuncio resultó cierto.
Así fue –brevemente– la love story de Luisana Lopilato (23) con el cantante canadiense Michael Bublé (35). Los novios sellarán su amor el próximo 31 de marzo en el Civil, y el sábado 2 de abril con una ceremonia religiosa y fiesta para 300 personas. Entre los invitados se encuentra un grupo de famosos locales íntimos de Luisana, como Guillermo Francella, Florencia Peña, Miguel Angel Rodríguez, Patricia Sosa, Georgina Barbarossa, Erica Rivas, Diego Topa, Marley, Suar y Griselda Siciliani. Las celebrities hollywoodenses estarán invitadas a “la otra” fiesta, la que realizarán el 20 de marzo en Canadá.
EL SI DE LOS NOVIOS. Los novios eligieron la majestuosa estancia Villa María para el día de la boda, con un hotel de campo –uno de los más distinguidos de la Argentina– que cuenta con once suites, restaurante gourmet, bar, cava de vinos, sala de habanos, billar y salones privados, además de las 74 hectáreas de parque que lo rodean. Allí se alojarán los 40 invitados de Bublé desde el jueves del Civil hasta el domingo.
El gran día comenzará con una ceremonia religiosa al atardecer. A las 19, y bajo una carpa al aire libre, Lu y Michael darán el “sí” ante un pastor evangelista bilingüe –las familias comparten religión pero no idioma–. Más tarde llegará la hora de la cena y la fiesta, que durará hasta el amanecer, todo organizado por la wedding planner Bárbara Diez, y con ambientación de Martín Roig. Habrá show de Ricardo Montaner, a quien el canadiense no dudó en contratar ni bien se enteró de que era uno de los favoritos de su amada. Y como era de esperarse, él le dedicará un par de temas.
EL VESTIDO Y EL AJUAR. Va a entrar como la princesa que siempre soñó ser. “Será una novia increíble, con un vestido importante pero no estrafalario”, explicó sin dar mucho detalle su asesor de imagen, Bernie Catoira. La modista será Sylvie Burstin. Con ese vestido de cuento pasará la ceremonia religiosa y el vals, y luego se cambiará por uno más cómodo, de la firma inglesa Marchesa, para el baile. El peinado estará a cargo de Alberto Sanders, y el make up, de Paola Dessaner. ¿El ajuar? Todavía está indecisa, pero eligió varios modelos de la marca de la que es imagen, Marcela Koury. “Para la noche de bodas optó por conjuntos de diseño especial con tul, puntilla y bordado; si no, ella usa generalmente los básicos y más simples”, comentó Teresita Galindo, diseñadora de la firma.
¿La lista de regalos? En Frávega y WedCompany, con opciones para todos los bolsillos, que arrancan desde $ 35. Todo para amueblar la casa de Nordelta que se acaban de comprar, y donde pasarán sus días en Argentina. 
“Para la noche de bodas optó por conjuntos de diseño especial con tul, puntilla y bordado; si no, ella usa generalmente los básicos y más simples”, comentó la diseñadora Teresita Galindo.
Divo de Hollywood pero sin divismos: así lo definen a Bublé. Luisana acompaña esos principios: son una pareja muy simple y realista. ¿Pruebas? A la hora de confeccionar la lista de regalos –que hicieron en Frávega y en WedCompany– eligieron opciones muy variadas, para todos los bolsillos (los regalos arrancan desde los $ 35).
Ultimando los detalles para su boda y luna de miel, Luisana aprovecha para ir de shopping. Bien austera como se la conoce, optó por visitar el outlet de Lonté acompañada por familiares.
